ESPECTáCULOS › “CARAMELITO” VUELVE HOY, CON UN PROGRAMA INFANTIL
Vení a pagar tu impuestito
“El arca de Caramelito” incluirá un juego para chicos esponsorizado por la AFIP. “Es una especie de ludo”, cuenta la animadora.
Por Emanuel Respighi
Cuando este mediodía comience en Canal 9 “El arca de Caramelito”, se sumará a la televisión nacional algo más que un nuevo programa infantil. Si bien estarán presentes todos los clichés del género (canciones, cuentos, bailes, juegos y muñecos), el programa que irá los sábados y domingos a las 12 tendrá un condimento por lo menos extraño para el target de público al que apunta: habrá un juego sobre la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). “La idea es que los chicos aprendan el recorrido del dinero destinado al pago de los impuestos. Es una especie de ludo en el que los chicos avanzarán casilleros y, según el color que les toque, tendrán que representar con mímica un oficio, un organismo o un impuesto”, explicó a Página/12 Cecilia “Caramelito” Carrizo, quien con este programa volverá a la conducción luego de dos años de estar alejada de la pantalla.
El juego, por demás innovador, tiene una explicación comercial. La productora del programa, Ideas+Ideas, firmó un convenio con el organismo estatal para realizar una política educativa televisiva. “Uno de los objetivos que la AFIP se propuso este año –subraya Caramelito– es la educación respecto de la necesidad de pagar los impuestos para poder disfrutar de muchos lugares que se solventan a través de los ingresos públicos. Les pareció interesante aplicar la educación a personas que están en pleno crecimiento. Ellos querían comenzar a educar a los más chicos en cuanto a las obligaciones y derechos de los ciudadanos a través de un programa infantil y se decidieron por el mío.”
–¿Cree realmente que el juego puede contribuir en algo?
–Yo estoy convencida de que es importante que los chicos sepan desde pequeños cuáles son sus derechos. Porque en materia de derechos los niños están abandonados. Deben saber que tienen derecho a disfrutar de una plaza limpia, ir a un hospital en condiciones y estudiar con dignidad. Pero, a la vez, deben saber que tienen que cumplir sus obligaciones de ciudadano. Es una enseñanza a futuro.
–¿Los chicos pueden entender la lógica del régimen impositivo?
–La intención es que los chicos comiencen a conocer cómo funcionan las cosas. La idea es que el contacto con esta realidad sea simple, porque ellos usan los museos, las plazas, la TV estatal... espacios que los niños pueden usar como beneficios. Queremos que se sientan un poco dueños de esos lugares, para que los empiecen a cuidar más. Es un mensaje muy simple, no es profundo ni complicado. No se les cuenta nada demasiado sofisticado. Obviamente que si este tema se tuviera que hablar con adultos se lo haría desde otro lugar y con otro mensaje.
–¿Cree que intenciones de este tipo sirven para recuperar la atención de los chicos en la era de Internet?
–No sé. Creo que es importante establecer un vínculo afectivo con la persona que está del otro lado. Los seres más pequeños son muy intuitivos y tienen una sensibilidad emocional mayor a la de los adultos. Creo que por más que la tecnología nos haya sobrepasado, los nenes siguen teniendo y pidiendo una infancia sana. Se entretienen muchísimo con un cuento, una canción... Siento que la tecnología no vino a reemplazar cosas que teníamos en nuestra infancia. Se sumó, es una cosa superútil. Los chicos no dibujan con el mouse de la computadora: siguen haciéndolo con papel y lápiz. En ese sentido, las cosas siguen siendo igual.
–La ferocidad comercial, ¿no atenta contra la lógica de los programas infantiles?
–Disfruto del teatro, la televisión y el disco. Son cosas únicas. Obviamente que la televisión es una caja de productos comerciales. No puedo ser hipócrita y decir que no es así, que tiene un sentido altruista. Desde un programa infantil hasta un periodístico, la TV es comercial. Mariano Grondona tiene también la tanda vendida y fuma habanos Cohiba. Entonces, quien dice que la TV no es para explotarla comercialmente, está mintiendo. El productor televisivo necesita tener inyecciones de dineropor otro lado. Pero no hay que mezclar la parte comercial con la artística.