ESPECTáCULOS
Gabriel Senanes por un Colón “que llegue lejos”
Hace un año se hizo cargo de la dirección del teatro. Era una etapa transitoria y, sin embargo, la enumeración de logros es contundente. Aquí traza un balance y esboza el futuro posible.
Por Diego Fischerman
Si la costumbre de medir con sensaciones se trasladara del clima a otras disciplinas, en el caso del año de gestión cumplido por el músico Gabriel Senanes al frente del Teatro Colón bien podría hablarse de una sensación temporal muy distinta. Y es que la sola enumeración de lo sucedido en el ámbito de ese teatro desde septiembre de 2002, cuando ni siquiera estaba programado el final de la temporada de ese año, parecería hablar del transcurso de un período de tiempo mucho mayor. La programación de este año, cumplida a rajatabla, los planes para el 2004, la concreción de los concursos artísticos –que no se hacían desde hacía diez años–, el comienzo de tareas de capacitación para los técnicos de la sala, la gira por Portugal del Ballet Estable y la próxima presentación de un espectáculo del Centro de Experimentación en París, los alquileres de puestas de ópera –desde la escenografía hasta las puestas completas, según el caso– en Estados Unidos, Latinoamérica y Europa y el incremento del público en un 26% son, en todo caso, apenas algunos de los hechos que aparecen en un primer balance.
“Esta fue una etapa que nos planteamos, necesariamente, como transitoria”, explica Senanes a Página/12. “Había que poder terminar el año pasado funcionando y ordenar las cosas para este año. Teníamos que afrontar el 2003 de manera que el teatro tuviera los días de función claros, que hubiera una programación y se cumpliera. Ahora empezaría otra etapa, que tendrá que ver, obviamente, con la vida general de la ciudad y con lo que suceda en las próximas elecciones. Y allí el plazo ya nos lleva hasta el centenario del teatro, en 2008. Hacia el futuro, creo que viene un período en el que tendremos que dar aún más calificación al aspecto artístico, ir cobrando cada vez más vuelo, consolidando a aquellos artistas locales que van teniendo condiciones irrefutables, proyectándolos, teniendo una dotación creciente de cantantes, bailarines, coreógrafos, directores argentinos que sean el núcleo de lo que podamos ir ofreciendo y, también, incrementar los intercambios con artistas internacionales. Lo que sigue será que las temporadas sean cada vez más importantes, trascendentes y creativas en lo artístico.”
Entre los logros más importantes de esta etapa, Senanes destaca “una política de puertas abiertas, de diálogo constante, de erradicación de unicatos y caprichos personales”. Con el Plan Maestro de Obras hasta el 2007 encaminado –lo que va a significar la completa restauración y reequipamiento del teatro– y con datos para enarbolar, como la duplicación de abonados al ballet y al ciclo de la Filarmónica de Buenos Aires o las más de 110 mil personas que pasaron por las funciones de El Colón por $ 2, el director del Colón dice que “por supuesto, no es sólo una cuestión de cantidad”. Y como prueba de la búsqueda de excelencia menciona el estreno de la puesta de Alfredo Arias para la ópera Bomarzo de Ginastera, la presencia de Guillermo Kuitca como escenógrafo de El holandés errante de Wagner (“bienvenidas las polémicas, en tanto son signo de un teatro vivo y de un público inquieto”, se ufana Senanes), la actuación de Egberto Gismonti y la programación de un plan de trabajo hasta 2007 con el notable director Charles Dutoit. “La programación debe ser armónica”, asegura Gabriel Senanes. “Debe haber elementos que tengan que ver con la historia y la tradición del teatro y otros que aporten novedades, aunque sean discutidos. Debe haber, también, pluralidad de tendencias estéticas. El teatro necesita las discusiones y polémicas, tiene que invitar a su público a pensar y repensar las cosas que se ven. Y también es fundamental la creación de un nuevo público. Esto es lo que garantiza cierta movilidad y cierta circulación, para que el teatro no se cierre en sí mismo.” Y, hablando del incremento de las producciones del Colón que se presentarán en el exterior, Senanes dice una frase capaz de sintetizar varios aspectos: “Lo que se hace en el Colón tiene que llegar lejos”.