ESPECTáCULOS
“Es cierto que gritamos mucho, pero en la tribuna también se grita”
Las chicas de “Fanáticas” cuentan la cocina de un ciclo futbolero atípico, en el que son “ellas” quienes imponen las reglas del juego.
Por Mariano Blejman
Algunos hombres suelen decir que las mujeres no pueden, ni deben, ni tienen que opinar sobre fútbol. Que es cosa de hombres. Además de buena parte de los conductores de Radio 10, también lo piensan productores de televisión y directores de programación. Por eso extraña que en un canal como el 9 –donde lo femenino está limitado a modelos en ropa interior, desde Polémica en el bar hasta La Peluquería de los Mateos– la irrupción de Fanáticas (domingos a las 24, en Canal 9) y su slogan “no sabemos tanto como Macaya, pero somos más lindas que Araujo” podría ser un hallazgo. Podría. Saben que unidas son dinamita y por momentos el programa tiene un clima ensordecedor: “Cuando nos juntamos siempre hay cachengue”, dice Karen Reichardt, conductora que no dice por quién hincha, pero se declara –a los gritos– fan total del fútbol.
En octubre, el programa pasó de América Sports al 9, en pleno Apertura. Según dicen, es el primer programa futbolero de mujeres. Karen Reichardt, actriz, modelo y conductora (Peor es Nada por Canal 13, Buenos Vecinos en Telefé, Rutas argentinas en América 2), conduce y es dueña de la idea (que en este caso no es de Carlos Avila). Entre las panelistas está Marcela Pacheco, fanática de River (CVN y Medios locos, Canal 7); Josefina Pouso, de Racing, modelo; María Rita Figueira, fanática de Boca, que escribió el libro Sí, sí, señoras; Débora D’Amato, de Independiente, periodista de Olé y conductora de Fox Sports; Natalia Labanca por San Lorenzo. También están las noteras Marisol Grasso y Pany Chama, y hay espacio para un hombre: Chiche Ferro; y se ve “El golazo”, portfolio hot de un jugador de fútbol de primera.
Participaron de la entrevista con Página/12 seis conductoras y dos noteras. Muchos critican ese timbre alto de voz en las conversaciones del programa y Karina se defiende: “Gritamos porque somos fanáticas, en la cancha también se grita... qué tanto”. Amato –la de Independiente– cree que las sienten gritar “porque tenemos timbres muy agudos”. Pacheco se las suele agarrar con Figueira (la de Boca) dentro y fuera de cámara: “Somos hinchas siempre”. Como sea, algunos/as piensan que el programa sería más entendible si se hablara más bajito. Se les pregunta si miran a los futbolistas o a los hombres. Karina responde que “Bolivia no incentiva tanto como Italia”. Pero interrumpe Figueira y, “como buena bostera” (le dicen las otras), sentencia: “Para mí, el latin lover es boliviano”. Amato dice que los jugadores se adaptaron a la farándula: “Son extremadamente coquetos”. Que ellos salen del vestuario, se perfuman, se arreglan, “buscan ropa clásica o de moda”, opina Pouso, la de Racing.
¿La mujer es machista si grita en la cancha? “Depende de lo que grite”, responde Amato. “¡Cuando te sacás, te sacás!”, señala Pacheco, que se saca seguido contra el mundo. Discuten fuerte y no sólo sobre fútbol, pero sobre todo discuten sobre fútbol. Amato dice, además, que “en masa y a lo lejos son todos machos”. Algunas –como ella– aseguran: “A mí jamás me tocaron el culo en una cancha”. Marisol (la notera) la contradice: “A mí me lo tocan todos los domingos”. Entonces Amato le responde que ella fue a la popular de Independiente por años y jamás le tocaron nada. Porque todas esconden (o mejor dicho enseñan) su pasado futbolero. Como si tuvieran necesidad de convertirse en eruditas, mostrando su pasado de potrero. Y cuando se les comenta eso, se enfurecen juntas.
Karina recorrió innumerables producciones con su “casetito”, y acepta que a veces sus compañeras no la dejen terminar las frases. La de Racing apunta que “una quiere imponer su idea, por eso interrumpe”, mientras que la de Independiente (para hacerle la contra) dice que nunca le dejan cerrar el concepto. El programa es de medianoche y tienen, según ellas, un público de “51% de hombres y 48% de mujeres”. Un porcentaje interesante. “Basta de mostrar tetas y culos”, pide Amato. Dicen que quieren tener la oportunidad de apasionarse en cámara, de dejar de llevar las bandejas para los sorteos de Sofovich. Además, Figueira sostiene que les gusta el fútbol de hombres (no el de mujeres).
No quisieran hablar de diferencias entre hombres y mujeres sino, de una vez por todas, de fútbol. Entonces, Natalia Labanca, de San Lorenzo, dice: “En la cancha no hay jerarquías, te encaran de igual a igual”. Y al final, Karina pide que le pregunten qué es ser fanática: “Es algo que se menea adentro tuyo, que da vueltas y estalla de diferentes maneras”.