Los “ejercicios de Kegel” contribuyen a mantener en buen funcionamiento el sistema sexual, tanto en la mujer como en el hombre. Fueron desarrollados por Arnold Kegel, inicialmente para la incontinencia urinaria. Se basan en el fortalecimiento del músculo pubococcígeo.

Sólo la primera vez, para identificar cuáles son los músculos correctos, conviene ir al baño a orinar e interrumpir el chorro. Los músculos correctos para estos ejercicios son los que interrumpen el chorro de orina.

El ejercicio es muy simple: contraer y relajar esos músculos 15 veces a la mañana, otras 15 veces a la tarde y finalmente otras 15 a la noche, durante la primera semana. Una vez que se logra hacerlo con comodidad, puede practicarlo en cualquier lado: manejando, en una reunión, mirando televisión o leyendo. Conviene hacer dos series: una es tenso-aflojo y otra es tenso-retengo la contracción tres segundos y aflojo.