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De los festejos del 27 de agosto de 2001 a la desazón de ayer. Ese fue el camino que recorrieron el subcomisario Edgardo Cejas, el inspector Mario Machado y los cabos Roque Mona y Jorge Fernández, finalmente condenados como autores responsables de la privación ilegal de la libertad y la extorsión sufridas, el 11 de abril de 2000, por el comerciante Desiderio Mezza. Ayer, luego de un primer juicio en el que habían sido absueltos, Machado fue condenado a cuatro años y medio de prisión, mientras que Cejas, Mona y Fernández, recibieron penas de cuatro años.
En el caso del subcomisario Cejas, el cargo fue “coacción”. En el nuevo juicio, a cargo del Tribunal Oral número 2 porteño, la fiscalía había solicitado penas de cinco años y medio de prisión para los cinco acusados. El único absuelto fue el sargento Domingo Castiglione. Los policías acusados pertenecían a la comisaría 30ª del barrio porteño de Barracas, donde fue llevado Mezza, con su hijo menor, con el único propósito de exigirle el pago de una coima. Los policías fueron filmados con cámara oculta, pero ellos mismos velaron la cinta cuando descubrieron la trampa que les había tendido Mezza. Los cuatro condenados seguirán presos.