SOCIEDAD › EN BARILOCHE UN VENEZOLANO SOMETIO A 13 NIÑAS
Marcha contra otro abusador
Hoy se realizará una marcha de silencio en Bariloche en repudio a los abusos a menores cometidos por Eduardo Pius Schlageter Boulton, el empresario venezolano de 71 años que fue detenido hace 10 días acusado de corrupción de menores luego de que un padre denunciara el abuso de su hija de 7 años.
La iniciativa fue convocada por vecinos de barrios carenciados de Bariloche en donde viven algunas de las niñas abusadas (entre ellos los barrios 2 de Abril y Malvinas), organizaciones de derechos humanos y gremios para “hacer reaccionar a la comunidad barilochense, que hasta ahora permanece indiferente ante hechos tan aberrantes”.
Schlageter Boulton está sospechado de haber abusado de 13 niñas con la colaboración del vendedor de cosméticos y lencería Bernardo Epstein (propietario de una pequeña casa donde el empresario llevaba a las chicas) y dos prostitutas que, según fuentes policiales, entregaban a las menores a cambio de 300 dólares.
El 4 de febrero el venezolano fue detenido luego de que un padre denunciara en la comisaría 28ª el abuso de su hija de 7 años cuando la vio llegar a su casa con ropa nueva: ante la sorpresa del padre, la niña le dijo que la habían vestido en la casa de unas amigas y que la habían llevado con “un señor que la había tocado”.
Los peritos determinaron que la niña no fue violada, pero detectaron lesiones en su zona genital. De acuerdo con las denuncias recibidas los investigadores establecieron que Sandra Oyarzo, de 20 años, y Patricia Uribe, de 18, eran quienes entregaban a las niñas por 300 dólares a Schlageter Boulton: las jóvenes habrían trabajado como prostitutas en el cabaret Venus, cercano a la casa de la calle Albarracín –propiedad de Epstein– que el empresario alquilaba para ir con las menores. Según dijo una fuente policial, hubo cinco niñas abusadas que eran parientes entre sí y otras dos eran hermanas de una de las prostitutas; entre los 13 casos denunciados por los que está sospechado el empresario se encuentran chicas de entre 2 y 13 años.
Schlageter Boulton veranea hace 30 años en Bariloche y se dedica a negocios petroleros y financieros: debido a que tiene 71 años se le concedió el arresto domiciliario en su mansión a orillas del lago Nahuel Huapi: la mayoría de las niñas que habría abusado viven en barrios pobres. La causa está a cargo del juez de instrucción Gregor Joos, que hace dos años se encontró con un caso similar: en febrero de 2001, el juez procesó con arresto domiciliario al empresario barilochense de 76 años Juan Gilio, que después fue condenado a 9 años de prisión por abusar de una niña de 12 que había sido entregada por su madre, una prostituta –amante de Gilio– condenada a 10 años.
La marcha de hoy comenzará a las 11 en la Ruta 258 y la calle Diagonal Gutiérrez; desde allí los manifestantes irán a la casa adonde el millonario llevaba a las niñas y finalizarán su recorrido en el Centro Cívico.