Más de un centenar de mujeres y niños que estaban en el club 17 de Agosto tras el desalojo concretado el lunes en un complejo de viviendas del Bajo Flores, fueron trasladados anoche a un parador temporario de Barracas. La medida fue dispuesta por el gobierno porteño y concretada pasadas las 18, y se llevó a cabo luego de que la Defensoría General de la Ciudad presentara una acción de amparo por las condiciones en que esas personas vivieron desde el lunes en ese lugar.

“La mayoría de las mujeres y niños que estaban en el club 17 de Agosto quedaron en el parador Azucena Villaflor, de Barracas”, informó una fuente de la Defensoría. La acción cautelar presentada por el defensor general ingresó a las 16 al Juzgado del juez Roberto Gallardo, quien había resuelto efectuar una inspección ocular en el club, pero la postergó para mañana.

En la presentación judicial, las mujeres alojadas en el club denunciaron que el club “no cuenta con las condiciones mínimas para asegurar un alojamiento digno y garantizar nuestra salud” y aseguraron que estuvieron en un “predio de grandes dimensiones, con un techo a gran altura en donde el frío se hace sentir”. Precisaron que tenían 59 camas para 100 personas y remarcaron que durante su estadía “no recibimos leche ni biberones para alimentar a nuestros hijos de corta edad”. “Un problema particular es la ausencia de atención médica. No se nos ha controlado, y algunas de nosotras sufrimos graves enfermedades que no están siendo tratadas”, dice la denuncia que acompañó la presentación de la Defensoría. Finalmente, el gobierno decidió el traslado antes de la resolución judicial.