Una locomotora chocó ayer por la mañana a un tren de pasajeros de la línea General Roca que estaba detenido en la estación de Temperley, en la zona sur del conurbano. Dieciocho personas sufrieron golpes leves a raíz del impacto y una beba de dos meses quedó internada por precaución en un hospital local. Según informaron fuentes de la empresa de transporte, el hecho fue causado “por un error humano”, cuando el maquinista de uno de los vehículos hacía maniobras a menos de 20 kilómetros por hora para ensamblarse a la formación que resultó chocada.

El accidente ocurrió a las 9.20, en el andén 2 de la estación. El servicio de trenes estuvo suspendido durante poco menos de dos horas.

A las 9.32, la delegación de Bomberos Voluntarios de Lomas de Zamora, partido donde se encuentra el lugar, recibía el primer llamado de emergencia. En cinco minutos, los oficiales de rojo estaban sobre los rieles para socorrer a las víctimas, contó a un canal de televisión Gustavo Liuzzi, un integrante de la fuerza.

“No fue una colisión violenta”, aunque “la potencia que tiene una locomotora produjo gran movimiento de la gente que estaba arriba” del tren, estimó Liuzzi. Según el bombero voluntario, el choque se produjo en la salida del servicio a diésel que conecta la estación de Temperley con la de Haedo, cuando el conductor de la locomotora retrocedía para engancharse a la formación. “La persona que manejaba está bien, porque el impacto ocurrió en la parte trasera” del vehículo, explicó.

De los pasajeros que se encontraban en la formación, 18 tuvieron que ser trasladadas al Hospital Gandulfo, a menos de diez cuadras, con contusiones y traumatismos sin gravedad. La médica Daniela Domingo, que se desempeña en la guardia de ese centro de atención bonaerense, señaló que una beba de dos meses quedó internada.

Pasadas las 9, cuando el tren tambaleó, la niña era cargada por su madre. “Cayó de sus brazos”, relataba Domingo frente a las puertas del hospital local. Cuando llegó al centro de salud, los estudios ratificaron que no había recibido heridas graves, pero los médicos decidieron dejarla en observación. Por lo menos hasta esta mañana, para seguir su estado de salud, adelantaron. Mientras tanto, el resto de los pacientes fue dado de alta.

El vocero de la Unidad de Gestión Operativa Ferroviaria de Emergencia (Ugofe), Eduardo Montenegro, destacó en diálogo con la prensa que “el impacto fue leve porque la locomotora iba a menos de 20 kilómetros por hora”.

En cuanto a los motivos que pudieron llevar al choque, el vocero aseguró que el impacto se debió a una “falla técnica”. “La locomotora debía cruzar a una vía paralela para reenganchar la formación por el otro extremo, pero a pesar de que la señal marcaba que el cambio estaba hecho, la locomotora quedó en la misma vía y empujó la formación”, detalló.

En el mismo sentido, puntualizó que la falla tuvo que haber sido en el cambio de vías, porque “el señalero había maniobrado el cambio de vías y el maquinista había advertido la señal”. Entonces, “los dos estaban convencidos de que la locomotora iba a salir paralela a la formación”.

El accidente demoró hasta pasadas las 11 de la mañana el servicio, con reclamos menores por parte de los usuarios. Hoy, en tanto, se conocerá la evolución del estado de salud de la beba.