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El abogado José Iglesias pidió ayer que se condene a 26 años de prisión a Rafael Levy, dueño del local donde funcionaba el boliche República Cromañón, y a 11 años al comisario de la zona, Gabriel Sevald, en el marco del segundo juicio por la tragedia de diciembre de 2004, donde murieron 193 personas. En su alegato ante el Tribunal Oral en lo Criminal 24 porteño, el abogado José Iglesias –que representa a la mayoría de las víctimas– le imputó a Levy el delito más grave, “estrago doloso en concurso real con cohecho activo”.

El letrado –cuyo hijo Pedro también murió en Cromañón– lo responsabilizó directamente por el incendio y también por “pagar coimas” para que el local de Bartolomé Mitre al 3000, en el barrio porteño de Once, “no fuera controlado por la Policía Federal”.

Iglesias solicitó el máximo previsto para ambas figuras legales, ya que el estrago doloso tiene una pena de entre ocho y veinte años de cárcel y el cohecho, de uno a seis. Además, entendió que Sevald, a cargo de la seccional 7ª al momento del incendio, fue “autor de cohecho pasivo”, recibir coimas para no controlar el predio, en concurso real con estrago culposo, es decir, sin intención.

Para el ex secretario de Seguridad porteño Juan Carlos López, el ex funcionario de mayor rango que llegó a juicio por este caso, Iglesias solicitó cinco años de cárcel por “incendio culposo seguido de muerte”. Igual pena reclamó para el segundo de López, el ex subsecretario de Seguridad Enrique Carelli, y para el ex director de Seguridad Privada Vicente Rizzo.

El alegato fue expuesto ante los jueces del TOC 24, María Cecilia Maiza, Marcelo Alvero y Raúl Llanos, quienes el martes próximo a las 9.30 continuarán escuchando a las otras dos querellas, representadas por los abogados Patricio Poplavsky y Marcelo Parrilli.