SOCIEDAD › UN CHICO HERIDO EN UN TIROTEO
Empresario baleado
Un empresario fue asesinado ayer a la tarde en la localidad bonaerense de José León Suárez cuando un grupo de ladrones entró a su fábrica, le exigió el dinero y las llaves de la camioneta y, aunque la víctima se las dio, le dispararon un balazo en el corazón. Los delincuentes escaparon y terminaron siendo perseguidos por la policía a través de 15 cuadras. En el trayecto, un chico de 14 años que caminaba por la zona resultó herido como consecuencia de la balacera entre policías y ladrones.
El hecho ocurrió a las 14.15 en una empresa del rubro de demolición ubicada en Libertad y José Hernández, de José León Suárez, momentos después de que José Terseiro, de 54 años, el dueño del lugar, arribara a bordo de su camioneta Nissan Pathfinder.
Según relataron fuentes del caso, en la empresa irrumpieron cuatro hombres fuertemente armados que sorprendieron a Terseiro, su socio y un empleado, y les exigieron que les dieran todo el dinero. También le reclamaron a Terseiro las llaves del vehículo. “Cuando le tiró las llaves, uno de ellos le disparó un balazo en la tetilla izquierda y escaparon a bordo de la camioneta”, señalaron las fuentes. La víctima fue trasladada por su socio y el empleado al Hospital Fleming, donde murió.
Mientras tanto, los delincuentes escaparon en la camioneta de Terseiro. Sin embargo, a pocos metros de allí fueron observados por personal de la comisaría 4ª de San Martín, por lo que se inició una persecución y tiroteo que se extendió unas 15 cuadras. En la huida los delincuentes dispararon varias veces, hasta que al llegar a la calle Combet y un zanjón de Villa Cárcova los ocupantes de la camioneta se bajaron y trataron de escapar a pie. Allí, tres de los delincuentes lograron refugiarse dentro del asentamiento, mientras que uno, de 29 años, fue apresado por la policía.
Durante la fuga, uno de los disparos dejó lesionado a un chico de 14 años que pasaba por el lugar y fue rozado por un proyectil en la pierna derecha. El chico fue trasladado al hospital y se encuentra fuera de peligro.
La fiscalía de San Martín que quedó a cargo de la causa ya dispuso el secuestro de las armas de los policías para determinar si de alguna de ellas partió la bala que le provocó las heridas al adolescente.