Sábado, 25 de abril de 2015 | Hoy
SOCIEDAD › VUELOS SUSPENDIDOS, CENIZAS EN EL AIRE Y ACTIVIDADES EN ESPERA
En la Patagonia argentina continuaron los efectos de la erupción del Calbuco, pero las autoridades evaluaban reanudar las operaciones de los aeropuertos, ante la dispersión de la pluma. El ministro de Salud aseguró que no hay “casos de personas afectadas”.
En la Patagonia argentina continuaron sintiéndose los efectos de la erupción del Calbuco, aunque su intensidad decreció en relación con los días anteriores. Las elecciones de mañana, que decidirán nuevo gobernador, no fueron suspendidas, algo que sucedería “sólo por una catástrofe”, dijo el actual mandatario provincial, Jorge Sapag. En Río Negro, la región “más complicada la tenemos en los valles, que es adonde se ha dirigido la nube”, detalló el gobernador Alberto Weretilneck. La pluma, además, ayer había dejado ceniza en suspensión sobre territorio de Chubut, donde el director de Emergencias Sanitarias del Ministerio de Salud provincial, Claudio Mazza, pidió a los comerciantes que “colaboren” y no suban “exageradamente” los costos de los barbijos, como señalaron los ciudadanos. Durante el vuelo de regreso desde Rusia, la presidenta Cristina Fernández se comunicó con funcionarios de las zonas afectadas, informó el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, quien además recordó que será “el Comité de Emergencia el que coordinará las acciones entre Nación, provincias y los municipios afectados”.
Por la dispersión de las cenizas, que podrían afectar los motores de los aviones, fueron suspendidas las operaciones de los aeropuertos de Bariloche, Neuquén y Chapelco, mientras que vuelos internacionales que debían llegar a Ezeiza fueron cancelados, en previsión de posibles complicaciones. La pluma, como se denomina a la nube de restos volcánicos, se dividió en dos regiones; una de ellas llegó con concentración “muy baja” a Buenos Aires, donde dio al cielo un “aspecto brumoso” y redujo la visibilidad de modo no significativo, explicó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). Por la noche, el ministro de Salud de la Nación, Daniel Gollán, informó que no se registraron “casos de personas afectadas”, y que “el panorama es bueno, está todo controlado”.
Las autoridades neuquinas y rionegrinas, por lo demás, aconsejaron a los turistas no viajar, de momento, a los centros invernales. De los 600 visitantes que habían llegado a la zona afectada por la actividad volcánica antes del miércoles, unos 400 lograron volverse, informó el jefe de Defensa Civil de Bariloche, Pablo Cavalli, quien recomendó “postergar las excursiones hasta dentro de 15 días”. En tanto, en el Congreso, el senador Miguel Angel Pichetto, quien forma parte del Comité de Emergencia, y su par Silvina García Larraburu, presentaron un proyecto de ley para declarar “la emergencia económica, social y productiva” durante 180 días en distintos departamentos de Río Negro y Neuquén afectados por la erupción.
Anoche, el SMN informó que el viento desplazaba a la ceniza volcánica residual en dirección noreste y este, hacia Neuquén, Río Negro, el oeste de La Pampa y el sudeste de Mendoza. Esa dispersión alivió la situación de Bariloche, San Martín de los Andes, Junín de los Andes y Villa La Angostura, las zonas argentinas que habían resultado más complicadas por las consecuencias de la erupción. Desde el miércoles, en esos lugares las clases fueron suspendidas, la administración pública postergó sus actividades, muchos comercios permanecieron cerrados y los pocos pobladores que salían a la calle lo hacían munidos de barbijos, cuyos precios treparon abruptamente en los últimos días, de acuerdo con denuncias de vecinos de las zonas afectadas. La remarcación podría traducirse en clausuras, advirtió la ministra de Seguridad, Cecilia Rodríguez, desde Bariloche, quien criticó “la codicia de alguno que piensa en especular con la necesidad”.
En Bariloche, donde comenzó a evaluarse la posibilidad de reabrir el aeropuerto, el registro de partículas en suspensión pasó de 1150 microgramos por metro cúbico, registrados el miércoles, a 264, ayer. El ministro Gollán aseguró que “la situación está bastante bien, el panorama es bueno, está todo controlado”. El funcionario, que viajó al sur junto a su par de Seguridad, Rodríguez, para acompañar un cargamento de insumos sanitarios, detalló que no hubo reportes de casos de personas afectadas, y que “la gente está tranquila, asumió bien” la emergencia. La ceniza que cayó en estos días “es un polvo muy finito, que contiene silicio y calcio, no es tóxico”, aclaró, y diferenció la erupción del Calbuco de la sucedida en marzo del año pasado en el volcán Villarrica.
El gobernador rionegrino, Weretilneck, subrayó en conferencia de prensa que la caída de cenizas “es un fenómeno que ya vivimos y que no afecta las fuentes de agua”. “La recomendación es tratar de reducir al máximo la actividad de los municipios”, explicó, minutos después de detallar que “la situación más complicada” se registró en los valles. La caída de cenizas complicó el final de la cosecha de manzanas.
En Bariloche, San Martín de los Andes y Villa La Angostura, las autoridades pidieron a los establecimientos hoteleros que mantengan alojados a los turistas que aún no pudieron regresar a sus lugares de origen. En los tres lugares, las excursiones estaban suspendidas por la difícil transitabilidad de las rutas, y para no exponer a los visitantes a riesgos. Por su parte, la Administración de Parques Nacionales informó que por la precipitación de cenizas se tomaron medidas preventivas en los Parques Nacionales Laguna Blanca, Lanín, Los Arrayanes, Nahuel Huapi, Lago Puelo y Los Alerces, de modo de garantizar los protocolos de seguridad previstos. A diferencia de lo que sucedía en Chile, ayer los parques argentinos continuaban abiertos, y la administración dispuso que el operativo de prevención quedara a cargo de la Coordinación de Lucha contra Incendios Florestales (CLIF), que asistirán a pobladores, comunidades, prestadores y visitantes que lo requieran.
Mientras que los vuelos de Aerolíneas Argentinas hacia Bariloche, que despegan de Aeroparque, fueron suspendidos por la clausura de los aeropuertos patagónicos, cinco compañías internacionales cancelaron otros tantos procedentes de Estados Unidos, Canadá y Francia, que debían llegar a Ezeiza. Air France, American Airlines, Delta, United y Air Canada cancelaron servicios que debían llegar desde París, Nueva York, Dallas, Miami, Atlanta y Toronto. El SMN adelantó que la nube de ceniza podría llegar hoy a Uruguay.
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