Brian Núñez, el joven de 24 años torturado en 2011 por tres agentes del Servicio Penitenciario Federal en el penal de Marcos Paz, recuperó la libertad tras ser beneficiado por una atenuación de la pena por haber sufrido esos tormentos. La Cámara de Casación Penal decidió reducir la pena única impuesta por los delitos de “robo y tentativa de homicidio” y anular la declaración de reincidencia. En sus consideraciones, el fallo sostiene que al mensurar la pena, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 27 había omitido valorar los actos de tortura materializados en el ámbito penitenciario en perjuicio de Núñez. El 16 de junio último los agentes involucrados fueron condenados en un juicio oral y público.