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Papá Noel, los heridos y los muertos: más de 500 personas, en su mayoría niños, fueron asistidas durante la madrugada de ayer en la Capital Federal por heridas y quemaduras leves, debido al mal uso de pirotecnia y descorche de bebidas alcohólicas. Las balas perdidas provocaron dos muertos y ocho heridos –entre ellos un bebé–. El Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) informó que durante la pasada Nochebuena hubo menos pedidos de auxilio que en el 2002 y destacó que el 90 por ciento de los casos fueron atenciones a menores de edad. En el Gran Buenos Aires, cinco personas murieron baleadas o apuñaladas y otras seis resultaron heridas como consecuencia de distintos episodios de violencia.
El SAME porteño informó que durante la Nochebuena se hicieron 393 auxilios médicos en el ámbito porteño, en asistencia de personas heridas. Desde la Secretaría de Salud de la Ciudad y de los hospitales oftalmológicos de referencia estimaron que el 90 por ciento de personas atendidas por uso de pirotecnia o descorche de bebidas fueron menores de edad. La dirección del Sistema de Atención destacó que la totalidad de las personas auxiliadas marca una disminución respecto del año anterior, cuando se hicieron unas 584 atenciones de emergencia.
En tanto, en los hospitales oftalmológicos Santa Lucía y Lagleyze y del Quemado –los tres centros porteños referentes para atender lesiones oculares o quemaduras– fueron asistidos 123 heridos, de los cuales 84 fueron niños de entre 9 y 12 años. De ellos, un nene de 11 años sufrió el estallido del globo ocular cuando manipulaba una artefacto de pirotecnia, por lo que fue internado de urgencia.
En la guardia del Lagleyze destacaron que “llamó la atención que un 80 por ciento de los heridos que llegó al hospital desde la medianoche fueron niños de entre 9 y 12 años”. Una situación similar se vivió en el hospital Santa Lucía porteño, donde al menos 31 personas, también en su mayoría niños, debieron ser asistidas por heridas en sus ojos. Fuentes de ese centro oftalmológico precisaron que, “de las personas atendidas, 25 fueron menores” y agregaron que del total “unas 29 sufrieron heridas por el uso de pirotecnia y dos por descorche de bebidas”.
En el Instituto del Quemado ingresaron 32 personas, entre ellas 12 chicos de hasta catorce años, de los cuales a cinco debieron efectuarles amputaciones en las manos por las graves lesiones sufridas por el estallido de elementos de pirotecnia.
En La Plata, cerca de 70 personas fueron atendidas ayer en distintos establecimientos asistenciales como consecuencia de las quemaduras sufridas al manipular elementos de pirotecnia, informaron fuentes sanitarias. En el Hospital del Niño Jesús, en San Miguel de Tucumán, fueron atendidos 39 chicos, entre ellos uno de 6 años que, tras estallarle un petardo en la mano, le fueron amputados tres dedos.
En Córdoba, en el Hospital del Quemado debieron atender a 20 lesionados. El jefe de guardia precisó que los heridos fueron cinco niños y el resto adultos, en su mayoría hombres. Por su parte, en el Hospital de Niños de la capital salteña, cuatro chicos ingresaron a la madrugada con quemaduras leves en distintas partes del cuerpo.
Las balas perdidas dejaron a un joven y un adolescente de 14 años muertos en el Berazategui (al sur del conurbano) y Matheu (partido de Escobar), mientras que ocho personas fueron heridas: cuatro en el Gran Buenos Aires y otros cuatro en la ciudad de Rosario, uno de ellos un niño de un año y medio que recibió un disparo en el pecho pero está fuera de peligro.
Por otra parte, cinco personas murieron baleadas o apuñaladas y otras seis resultaron heridas como consecuencia de distintos episodios de violencia ocurridos en Nochebuena. A las 4 de ayer, el suboficial de la policía bonaerense Enrique Mercado fue herido de dos balazos tras tirotearse con tres delincuentes, a uno de los cuales mató, en la puerta de una casa de un familiar donde celebraba la Navidad, en Lomas de Zamora. Una hora después, un hombre mató a puñaladas a su sobrino durante una discusión que tuvieron tras brindar por la Nochebuena, en José C. Paz. También en la madrugada de ayer un hombre fue asesinado a balazos en el complejo habitacional Don Orione, partido de Almirante Brown. En otro episodio, un hombre mató de un balazo en la cara a su esposa, con quien discutió tras el brindis de Nochebuena, en Villa Centenario. En tanto, una persona murió y cuatro resultaron heridas, tres de ellas policías, durante una pelea ocurrida al término de un baile en la localidad de Paso de Indios, 300 kilómetros al oeste de Rawson.
Además, un adolescente de 16 años que era buscado por el asesinato de un jubilado fue detenido por la policía en la ciudad bonaerense de Chivilcoy, cuando visitó a su madre para celebrar la Navidad.