“Haber logrado su libertad significa un avance muy importante”, dijo Soledad Deza (foto), abogada de Belén, la joven tucumana condenada por homicidio tras un aborto espontáneo y liberada ayer, después de pasar cerca de 900 días en prisión, tras una medida dispuesta por la Corte Suprema provincial, mientras su causa sigue en revisión. “Ahora esperamos que la Corte revise la condena” dijo la abogada de Belén, de Católicas por el Derecho a Decidir, quien adelantó que su tarea se centrará en revisar el proceso que determinó la condena y avanzar en un sumario administrativo hacia los jueces que revelaron la identidad de la joven tucumana en medios provinciales. Deza dijo que “la violación del secreto profesional que nosotras planteamos coincide con la postura del ministro fiscal Edmundo Jiménez, quien sostiene que eso genera la nulidad de la causa desde fojas uno”. Por otra parte, agregó que el próximo objetivo es lograr que “la Corte resuelva el segundo recurso de casación que planteamos para que se revise la condena” que dispuso ocho años de prisión para Belén y recordó que hay “un dictamen del ministro fiscal favorable en el tema, que coincide con todos los planteos que hemos hecho”. El dictamen de Jiménez “expone todas las inconsistencias en materia probatoria y las contradicciones existentes entre las pruebas valoradas y las que no se han valorado, aceptando que incluso hay afirmaciones falsas dentro de la condena” dijo Deza, quien también cuestionó a los integrantes de la Sala, Dante Ibáñez, Néstor Rafael Macoritto y Fabián Fradejas, por haber extendido 48 horas el cumplimiento de la liberación de Belén que la Corte había ordenado.