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Alfredo Cahe, médico personal de Diego Armando Maradona, apenas pudo confirmar que los centros de rehabilitación locales para adictos “no aceptan” la internación del ídolo del fútbol, cuando aparecieron tres posibles receptores, en lugares de lo más diversos: Villa Paranacito, en Entre Ríos, una clínica de la provincia de Buenos Aires y una tercera ubicada en la capital uruguaya. El responsable del centro de Villa Paranacito, Juan Carlos Ferreira, afirmó que la familia del ex futbolista “se contactó”, por medio de terceros, para analizar la posibilidad de un tratamiento en esa ciudad entrerriana. Otra versión anticipa el traslado, este martes, a una clínica bonaerense donde Maradona tendrá que estar internado durante seis meses, sin recibir visitas, salvo la de su ex esposa, Claudia Villafañe, que podrá verlo por primera vez a los 60 días. Por su parte, el diario El País, de Montevideo, difundió la alternativa de llevarlo a un centro de esa ciudad, proyecto que contaría con el aval de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF).
Maradona sigue internado en la Clínica Suizo Argentina, donde su director, Claudio Belocopit, confirmó que el astro del fútbol “se quiere ir” del centro asistencial, aunque negó que haya provocado “destrozos en la habitación” donde se encuentra. Belocopit, respecto de las versiones sobre un inminente traslado, recordó que “para tomar una medida de ese tipo hay que contar con el aval expreso del paciente”. El médico admitió que “cuidar a Diego no es tarea fácil” porque “no se trata de cualquier paciente”, aunque insistió en que la definición “es inminente”. En cuanto al estado de salud de Maradona, se dijo que sigue “estable, con los signos vitales controlados y a la espera de que sus familiares decidan los pasos a seguir en el tratamiento”.
Juan Carlos Ferreira, del centro de rehabilitación ubicado en las islas de Ibicuy, en Villa Paranacito, declaró a la prensa que, aunque no habló personalmente con la ex esposa del futbolista, “existieron contactos a través de terceras personas”. Dijo que posiblemente “a lo largo de la semana” se concretaría el diálogo formal con los interesados. Anticipó que lo primordial en el tratamiento es “el aislamiento de la persona, y en el caso de Maradona, de su entorno”. Anticipó que el traslado debería ir acompañado de una orden judicial.
Sobre la negativa de cinco establecimientos a recibir al ídolo del fútbol, Ferreira aseguró que se debió a que “son clínicas psiquiátricas” en las que los adictos “no tienen contención mediante gente con su misma problemática” y sólo son “dopados”. Una versión publicada por AFP anticipó que Maradona será llevado “el martes” a una clínica especializada de la provincia de Buenos Aires. El astro del fútbol debería permanecer seis meses bajo estricto tratamiento, sin recibir visitas. Sólo su ex esposa podrá hacerlo recién a los dos meses de internación.
El drama que vive la familia obligó a suspender el cumpleaños número 15 de su hija Giannina, que debería realizarse el 21 de este mes. Fuentes allegadas al ídolo aseguraron que Maradona está de “muy mal humor” porque “no quiere ser trasladado; sólo quiere irse a casa”. El abogado Oscar Moyano, apoderado de Maradona, dijo que “hay consenso en la familia para trasladar” al ex futbolista.
Una tercera posibilidad, publicada en Montevideo, sostuvo que Diego Maradona podría iniciar un tratamiento de rehabilitación en la capital uruguaya. Así lo hizo saber el diario El País en su edición de ayer. Según el diario, el traslado de Maradona contaría con el apoyo de Oscar Magurno, dirigente de la AUF. Lo único cierto, por ahora, es que el lugar donde sería trasladado Maradona sigue siendo una incógnita, tanto como la duración y la complejidad del tratamiento al que deberá someterse. La última novedad viene de Nápoles, donde se dijo que Diego Maradona Junior estaría por viajar a la Argentina para visitar a su padre enfermo. “Mi hijo estaría dispuesto a visitarlo, si esto le sirve de motivación para seguir viviendo”, declaró Cristiana Sinagra, la madre del joven, quien hace poco tiempo logró que Maradona reconociera su paternidad.