SOCIEDAD › UN JUEZ PIDE REFORZAR LA FORMACION CONTRA LA XENOFOBIA
Un manual contra el racismo
En la causa contra tres supuestos skinheads que hostigaron a un joven judío, el juez federal Daniel Rafecas sobreseyó a los imputados y recomendó al Estado intensificar los contenidos escolares antidiscriminatorios.
Por Mariana Carbajal
El juez federal porteño Daniel Rafecas sobreseyó a los tres jóvenes que un mes atrás agredieron y hostigaron al hijo de un rabino por su condición de judío. Pero al mismo tiempo hizo un “serio” llamado de atención a las autoridades educativas de la Nación y de la ciudad de Buenos Aires y las exhortó a “reforzar” los contenidos escolares vinculados con el racismo y la xenofobia “con el fin de conjurar la circulación y arraigo temprano en adolescentes de estas ideas tan negativas para la formación de una conciencia ciudadana y democrática”. Además, Rafecas sugirió que se implemente como política que los alumnos secundarios concurran al menos una vez a un museo o a una entidad que aborde la problemática. El mismo magistrado se había encargado en persona de ofrecer una visita guiada a los tres imputados en el Museo del Holocausto (ver aparte).
Rafecas lanzó sus propuestas educativas luego de analizar en profundidad el caso de los tres adolescentes porteños, que en un principio fueron sindicados por la Policía Federal como skinheads. La investigación judicial descartó que pertenecieran a algún grupo neonazi. Lo que sí probó el Juzgado en lo Criminal y Correccional Nº 9, interinamente a cargo de Rafecas, fue que el 17 de agosto el chico judío, de 15 años, que llevaba una kipá, fue hostigado verbalmente por uno de los tres amigos en la puerta de un locutorio con frases como “te vamos a agarrar”, “hablá tranquilo por teléfono que te vamos a esperar”, “los judíos nos tienen cansados” (ver aparte).
“Es evidente que su comportamiento ha sido guiado –más que por el odio racial o religioso– por la ignorancia, la desinformación, el prejuicio y el miedo a lo diferente, propio de aquellas personas aún inmaduras que no encuentran en las instituciones sociales –desde la familia hasta la escuela– ni en la cultura actual, la orientación, la contención suficiente ni la identificación como para desarrollar su personalidad como ciudadanos de un Estado de derecho”, opinó Rafecas en su resolución –a la que tuvo acceso Página/12–, y que lleva también la firma del secretario del juzgado, Juan Rozas. Rafecas evaluó que, si bien existen en los planes de estudio contenidos vinculados “con el racismo y la xenofobia”, el episodio que tuvo que investigar “muestra a las claras que no siempre ese mensaje ha sido transmitido convenientemente, si es que se lo ha concretado”. Por esa razón, propuso el “rediseño de la estrategia educativa que tienda a reforzar aquellos contenidos ya previstos” y sugirió que los estudiantes secundarios, al menos una vez, visiten un museo o entidad similar vinculada con la problemática del racismo y xenofobia. “Por experiencia propia al dictar una clase por cuatrimestre en el Museo de la Shoah a estudiantes universitarios, resulta particularmente eficaz para que el visitante tome debida conciencia acerca de la gravedad de los sucesos que pueden desencadenarse a partir del pensamiento xenóbofo o racista”, señaló Rafecas, quien es profesor de Derecho Penal de la UBA.
Fuentes del juzgado aclararon que no es intención del magistrado “invadir esferas que no le competen, pero consideró conveniente hacer este llamado de atención, para que se tenga en cuenta”.
Tanto en la Secretaría de Educación porteña como en el Ministerio de Educación aceptaron la propuesta del magistrado. “Lo tomamos como una sugerencia que suma. Este tema tiene que ser trabajado en la escuela y la familia”, señaló a Página/12 la secretaria porteña de Educación, Roxana Perazza, y aseguró que ya se ve en las aulas de los secundarios de la ciudad. “Siempre son bienvenidas estas alertas. La democracia y los derechos humanos son una construcción”, consideró el secretario de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, al ser consultado por este diario. El funcionario aclaró que el tratamiento del Holocausto del pueblo judío está incluido en los contenidos básicos comunes (CBC), puntualmente en los de tercer ciclo de EGB (7º grado y 1º y 2º de secundario).
“Probablemente, en algunas escuelas el tema se enfatice menos”, reconoció Sileoni. En el 1º y 2º ciclo del EGB –detalló– está previsto abordar temas como el respeto a la dignidad de las personas y el derecho a la no discriminación por raza, religión y género. “Hace un año hicimos un cuadernillo sobre el genocidio armenio y ahora estamos lanzando un CD sobre la última dictadura militar, que recoge testimonios y análisis de época, para utilizar en las escuelas medias”, detalló Perazza.
Los tres jóvenes que estaban imputados del delito de amenazas agravadas por la Ley Antidiscriminatoria viven en la ciudad de Buenos Aires, en los barrios de Villa Pueyrredón, Villa Devoto y Belgrano y concurren a escuelas medias públicas porteñas. Uno, de 16 años, a 3º año y los otros dos, de 17, a 4º. Casos como éste, advirtió el magistrado, “no pueden dejar de significar un serio llamado de atención para todas las instituciones que forman parte del Estado de derecho”, ya que “de generalizarse” pondrían “en crisis pilares básicos de la democracia y obligarían a replantear la posición estatal frente al problema de la xenofobia y la discriminación”.