SOCIEDAD › FABRICANTES A SALVO EN EE.UU.
Victoria armada
Por David Usborne *
Desde Nueva York
El lobby de armas en Estados Unidos logró una poderosa aunque no inesperada victoria cuando el Congreso aprobó un proyecto de ley que prohíbe a las víctimas de armas de fuego demandar a los fabricantes de armas. La ley, que obtuvo la luz verde del Senado en julio, fue aprobada por 283 a 144 en la Cámara de Representantes e irá a la Casa Blanca. Los funcionarios confirmaron que en breve será promulgada por el presidente George Bush.
La aprobación de la ley le ofrece un respiro al presidente Bush mientras lucha con los niveles de aceptación, los errores durante el huracán Katrina y los recientes cargos criminales presentados contra Tom DeLay, obligándolo a renunciar al liderazgo de la mayoría en la Cámara de Diputados. El voto demostró cómo las mareas políticas se han volcado a favor del campo que defiende el derecho a poseer armas. Ayer ya se empezaron a preparar las celebraciones en la Asociación Nacional del Rifle, que luchó por la ley. Para los que defienden el control de armas fue un día nefasto.
“Los pleitos que tratan de hacer responsables a la industria de las armas por el uso criminal e indebido de sus productos son descarados intentos de lograr con el litigio lo que no ha sido logrado por las leyes y el proceso democrático”, dijo el presidente del Comité Judicial de la Cámara de Diputados, James Sensenbrenner, un republicano de Wisconsin. Veinte pleitos contra los fabricantes de armas están pendientes en todo el país, entablados por gobiernos locales. Cuando la ley sea promulgada, serán desechados por las cortes. Los comerciantes de armas están protegidos por la nueva ley.
La gran mayoría de los republicanos en el Congreso estaba tratando de asegurar la supervivencia de la ley desde las elecciones del año pasado. También hubo un creciente apoyo público alimentado en parte por los hechos en Nueva Orleans después de Katrina, cuando la ciudad caía en la anarquía sin la protección de la policía. “Los estadounidenses vieron una total caída en la habilidad del gobierno para protegerlos –dijo Wayne LaPierre, vicepresidente ejecutivo de NRA– al ver esas fotos de gente defendiendo sus vidas y sus propiedades donde la única fuente de consuelo era un arma de fuego.”
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.