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La Justicia de Mar del Plata investiga la procedencia de un grupo que, con vestimenta militar camuflada, capuchas y armas largas, realizó, este fin de semana, un “operativo de control” en playas al sur del faro. El fiscal Marcos Pagella indicó que las fuerzas de seguridad de la ciudad, donde en noviembre transcurrirá la Cumbre de las Américas, “negaron” haber intervenido en esos “operativos”, según respondieron a los oficios cursados por quienes investigan la denuncia que formularon los requisados.
“Se investiga la procedencia de estos sujetos que vestían ropas militares y portaban armas de grueso calibre”, confirmó Pagella.
Según el relato de los investigadores, siete personas –con el rostro cubierto por pasamontañas, uniformados y armados– se presentaron en el camping El Alamo, ubicado en ruta provincial 11, camino a Miramar. Los encapuchados ordenaron “con términos militares” a familias y pescadores que se tiraran al suelo mientras los identificaban y revisaban sus pertenencias. Los damnificados contaron que el grupo se negó a mostrar credenciales y que, tras revisarlos, se fueron en motos.
Al radicar la denuncia en la comisaría quinta de Mar del Plata, las víctimas aclararon que no fueron asaltadas. Si bien el proceder del grupo misterioso “podría considerarse un abuso de autoridad”, Pagella subrayó que “las fuerzas (de seguridad) consultadas negaron participar de operativos de esa índole”.