Eugenio Villela, el hombre que mató a balazos a dos ex socios e hirió a otras cuatro personas en una empresa de transportes de San Miguel, en donde se desempeñó hasta diciembre pasado como directivo, declaró ayer en la Fiscalía de San Martín que no recordaba “absolutamente nada” de lo ocurrido. Aseguró que “no había ningún tipo de deuda” pendiente entre las partes, como se creyó en un principio, y explicó que había ido a la empresa para “devolver el arma” con la que finalmente cometió los homicidios. En quince días se le dictaría la prisión preventiva.

Al parecer, el ex socio de la empresa La Primera de Grand Bourg estaba deprimido. En la declaración, “Villela dijo que se sentía triste porque hacía 30 años que trabajaba en esa empresa y, según relató, era como su hogar; que desde que se desvinculó de la empresa se la pasaba tirado en la casa mirando televisión todo el día sin hacer nada”, informó a Página/12 el fiscal Hernán Córdoba. Aunque negó que le debieran dinero, cuando se le pidieron precisiones sobre el tema económico, el ex directivo “no fue muy claro en sus respuestas”, agregó el fiscal.

“Sólo explicó que recuerda hasta que entró a la empresa, que escucharon algunas risas, y que después apareció sentado en la plaza de San Miguel con el arma encima. Nada más”, agregó. “Las primeras pericias que se hicieron dieron bien –explicó–. No creemos que haya pasado algo como para que no se acuerde de lo que hizo. Ahora se va a pedir una pericia psiquiátrica más profunda, y veremos si en 15 días se dicta la prisión preventiva.”