SOCIEDAD › CONSTRUIRAN UNA DOBLE EMPALIZADA DE 45 KILOMETROS EN EL SARMIENTO

Una extensa muralla hacia el Oeste

La obra apunta a evitar accidentes, robos y vandalismo. Estará finalizada en un año. Tendrá 2,30 metros y será de cemento y metal.

 Por Eduardo Videla

Un doble muro de 45 kilómetros de largo separará a las vías del ex Ferrocarril Sarmiento del resto del mundo, tanto en la ciudad de Buenos Aires como en la provincia, desde la estación Caballito hasta Moreno. No se trata de un proyecto sino de una obra que fue adjudicada ayer a tres empresas y cuya ejecución comenzará en unos días. Se trata de un cerco perimetral, la mitad inferior de cemento, y la parte superior con una malla metálica. Constituye la primera parte de un proyecto que incluye el soterramiento de todo el ramal ferroviario. Este tramo se realizará en un año y costará 52 millones de pesos. Su objetivo es fortalecer las medidas de seguridad en esa línea ferroviaria, para “evitar accidentes en los cruces clandestinos de vías, así como para prevenir actos de vandalismo y robo de cables y material ferroviario”, según explicaron fuentes oficiales.

El denominado “Cerramiento Perimetral Antivandálico de la Línea Sarmiento” tendrá una extensión de 45.000 metros. La empalizada, que sólo está interrumpida por los pasos a nivel, consta de un muro de hormigón de 1,10 metro de alto, sobre el cual se levantará una malla metálica de 1,20 metro, hasta completar los 2,30 metros de altura. La base tendrá medio metro de ancho y la parte superior, 25 centímetros.

La obra apunta principalmente a evitar el ingreso de personas ajenas al servicio ferroviario, dado que las vías están electrificadas y suelen producirse accidentes por ese motivo. “En todo el ramal, salvo en los lugares habilitados para el cruce, hay un tercer riel con 830 voltios, tapado con una madera”, informó Gustavo Gago, vocero de la empresa TBA, concesionaria del servicio.

El secretario de Transporte, Ricardo Jaime, le puso números a esa situación de riesgo: dijo que en el Sarmiento se registraron “más de 850 accidentes en pasos a nivel y pasos peatonales, lo que trajo aparejado más de 50 pérdidas humanas y 40 heridos de distinta gravedad”.

El objetivo del cerramiento perimetral, además, es evitar “actos de vandalismo, como el apedreo de formaciones ferroviarias, que pueden producir heridas a los pasajeros, y el robo de material para la señalización, como el cableado de cobre”, informó una fuente de la Secretaría. “Esos hechos –agregó el vocero de TBA– no sólo provocan trastornos en el servicio ferroviario sino a los automovilistas, porque las barreras suelen quedar bajas.”

El anuncio se hizo en un acto que se llevó a cabo en la Casa de Gobierno y que fue encabezado por el presidente Néstor Kirchner; también participaron el jefe de Gobierno porteño, Jorge Telerman; los ministros del Interior, Aníbal Fernández, de Planificación Federal, Julio De Vido, y de Salud, Ginés González García.

La obra se encuadra dentro del marco del decreto 1683/2005, que incluye el proyecto de soterramiento de las vías del Sarmiento, desde Caballito hasta Liniers. La línea ferroviaria, que tiene su terminal en Once, recorre los primeros kilómetros por debajo del nivel de la calle. Sobre ese sector se construirá una loza, sobre la que está prevista la instalación de un espacio verde. Esa obra está en manos del gobierno porteño.

El soterramiento de la red ferroviaria, en cambio, está en manos del gobierno nacional. Consiste en bajar el tendido de vías que hoy va por la superficie a una trinchera bajo nivel, de manera que quedarían eliminados los pasos a nivel y se amortiguaría el ruido que provocan los trenes. Aunque el proyecto todavía no está cerrado, se sabe que el soterramiento se hará íntegramente hasta Liniers, mientras que todavía está en duda si en el tramo bonaerense el tren irá sobre la superficie o bajo nivel. Tampoco está claro aún si en Capital las vías estarán en una trinchera abierta o tapada con una loza.

¿Qué pasará con el cerco perimetral cuando se haga esa obra? En la provincia, quedarán, mientras que en el tramo de Capital habrá que ver cómo queda el proyecto, tal vez haya que removerlas y, en ese caso, podrían reutilizarse las mallas metálicas”, dijo Gago, de TBA. “En todo caso, se trata de una obra que estará finalizada en un año, contra otra que no se sabe aún cuando se terminará”, reflexionó una fuente vinculada con la implementación del proyecto.

Desde la Secretaría de Transporte, sin embargo, aseguran que si todo sale como está previsto, en diciembre se estaría adjudicando el proyecto de soterramiento, que podría iniciarse el año que viene.

Las empresas que ahora se harán cargo del cerramiento son las MDR Construcciones SA, que construirá 14,4 kilómetros de muro por un monto de 14 millones; Comsa de Argentina SA, que hará 14 kilómetros por 13,5 millones, y Ferplast SA-Sthan SA, que edificará 16,6 kilómetros por 16 millones de pesos. A todos los precios hay que sumarles el IVA. La empresa TBA será la encargada del control y fiscalización de la obra, en tanto que los fondos serán aportados por el Estado.

La parte de hormigón de los cerramientos es similar a la construcción que separa ambas manos de una autopista. Y las mallas metálicas son del tipo Shulman, similares a las que se ven en la foto que ilustra esta página, que corresponde a una instalación en la estación Castelar del Sarmiento.

Compartir: 

Twitter

El cerramiento será similar al de la foto, ubicado en Castelar, pero con más cemento.
 
SOCIEDAD
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.