Entre el lunes y el martes último, empresarios del sector de la construcción presentaron 27 permisos de obra ante el gobierno de la ciudad para levantar edificios en los seis barrios en los que se suspendió la autorización de permisos por 90 días: Caballito, Palermo, Núñez, Coghlan, Villa Urquiza y Villa Pueyrredón. Así, en dos días ingresaron el equivalente a un mes de proyectos en los barrios ahora “protegidos”. El mismo lunes, Jorge Telerman había anunciado que firmaría el decreto de suspensión de nuevas edificaciones, el cual fue publicado el martes en el Boletín Oficial de la ciudad. Ahora, en el gobierno de Telerman estudian qué hacer con los permisos presentados en esos días. Legalmente, no podrían frenar los del lunes, pero sí los del martes.

Si el boom de la construcción se midiera en términos de los permisos de edificación ingresados al gobierno de la ciudad entre el lunes y el martes pasados, la Argentina batiría un record mundial. Enterados de la decisión de suspender nuevas obras en seis barrios porteños, constructores y desarrolladores se apuraron a tramitar su expediente en esas zonas.

Según los registros de “control de expedientes de obras”, a los que accedió Página/12, el viernes 10 de noviembre se presentaron en toda la ciudad 7 permisos de obra, sólo 2 de ellos en un barrio hoy vedado (Villa Urquiza). Pero después de que se filtrara durante el fin de semana que Telerman tomaría la decisión de suspender nuevas edificaciones, frente a los reclamos de los vecinos que denuncian un colapso en los servicios del barrio, las cosas cambiaron drásticamente:

- El lunes se presentaron 14 permisos, de los cuales 12 corresponden a los barrios en conflicto (3 en Caballito, 3 en Núñez, 3 en Villa Urquiza, y 3 en Palermo).

- El martes, la tendencia se acentuó. De los 17 permisos declarados en toda la ciudad, 15 correspondieron a los barrios “blindados” (3 en Caballito, 3 en Palermo, 4 en Villa Urquiza, 3 en Villa Pueyrredón, 2 en Núñez).

- En total, 27 solicitudes para levantar edificios en esos barrios en sólo 2 días, una cifra equivalente a los pedidos presentados durante un mes.

La maniobra es similar a lo que ocurrió con la veda de las exportaciones de carne, decretada por el gobierno nacional en marzo. La medida fue anunciada el 8 de marzo, pero durante los tres días que tardó en publicarse el decreto en el Boletín Oficial los frigoríficos documentaron exportaciones equivalentes a varios meses.

En el caso de la ciudad, Telerman sabía que una cosa así podía suceder. Por eso su intención era firmar el decreto de suspensión de permisos el viernes pasado, pero dificultades en la Secretaría Legal y Técnica de la ciudad demoraron el anuncio hasta el lunes por la tarde. Ahora, legalmente no podrían frenarse los permisos del lunes, pero sí los del martes, porque este mismo día habría sido publicado en el Boletín Oficial el decreto 1929.

Hoy, empresarios de la construcción se reunirán con Telerman con la intención de que se revierta la medida lo antes posible, después de amenazar durante todo el día de ayer con que, de continuar vigente, “lloverán los recursos de amparo” ante la Justicia. Fernando Ezquerro, presidente de la Asociación de Empresarios de la Vivienda, contó que Telerman les prometió recibirlos “para hablar sobre esta medida en la que no fuimos consultados y que causa un perjuicio sin precedentes a nuestra actividad”.