La atención en el Hospital de Clínicas José de San Martín está paralizada debido a un paro por tiempo indeterminado establecido por el personal no médico, que reclama mayores insumos a la Universidad de Buenos Aires, de la que depende el centro de salud. La protesta es respaldada por el sector de profesionales. “Si no hay insumos, no se puede atender a los pacientes. No hay una mísera gasa, ni agujas ni vías para aplicar el suero”, contó una de las delegadas, que se acopló a la medida de fuerza. “Continuaremos con el paro hasta que el Rectorado autorice el aumento en los insumos”, advirtió. En este momento, el hospital sólo presta servicio de guardias y atiende a los pacientes que están internados, pero nadie puede asegurar hasta cuándo se podrá brindar la asistencia. “Se atenderá hasta que alcancen los insumos y después tendrán que evacuar el hospital”, alertaron los trabajadores. El decano de la Facultad de Medicina, Alfredo Guzzi, coincidió con el personal no médico sobre el estado de crisis que está viviendo el hospital. “La situación es compleja. Las cuentas están en rojo. Para solucionarlo, la Universidad debería destinar un millón de pesos ya, para solventar la escasez de medicamentos y de insumos”, remarcó. Y sostuvo: “Los decanos de la UBA estamos buscando posibles soluciones al problema”. Un conflicto que estuvo latente durante todo el año y que incluyó un pedido expreso del actual interventor del hospital, Angel Alonso. El funcionario reclamó un incremento del presupuesto de dos millones de pesos.