Cuatro pilotos de Austral Líneas Aéreas fueron sorprendidos en Aeroparque con mercadería proveniente del exterior, no declarada, y están siendo investigados por averiguación de contrabando. Los tripulantes fueron sorprendidos por la Policía de Seguridad Aeroportuaria cuando regresaban al país desde Miami, con un avión sin pasajeros, que acababa de ser incorporado a la flota de Austral. Curiosamente, pasaron el control de Aduanas, pero fueron frenados por los agentes de la PSA cuando desembarcaban televisores con pantalla de plasma y otros aparatos electrónicos. Fueron excarcelados pero el lunes deberán declarar ante el juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky.

El hecho, que generó revuelo en el ámbito aeroportuario, ocurrió el 6 de febrero último, pero pudo ser confirmado por este diario ayer, entre diversas fuentes vinculadas con el caso.

La nave, un McDonnell Douglas MD-83, llegó a Aeroparque alrededor de las 21. Con cuatro tripulantes y cuatro mecánicos. No traía pasajeros ya que se trataba de un viaje de traslado de una máquina recién adquirida por Austral, desde Miami a Buenos Aires.

Personal de Aduana registró el avión apenas arribado sin detectar elementos para declarar, pero cuando los pilotos se retiraban en una combi de la empresa Austral fueron interceptados por los agentes de la Policía Aeroportuaria. La inspección logró detectar que los tripulantes –uno de ellos, el comandante de la aeronave– se retiraban llevando consigo cuatro televisores plasma (uno de 42 pulgadas, dos de 32 y uno de 27), cuatro impresoras, una Play Station 2, dos cámara fotográficas digitales, un reproductor de DVD, una notebook y un juego de parlantes para computadora.

Diego Serra, titular de la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas –el gremio que nuclea a los pilotos de Austral–, confirmó el hecho y aseguró que el sindicato “apoya la investigación judicial pero también a nuestros asociados”, a quienes les prestará asistencia legal. Según Serra, lo que traían los pilotos eran aparatos “para su utilización personal y su valor no supera los 8000 dólares”. El dirigente dijo además que sus colegas fueron víctimas de una interna ente la PSA y la Aduana.

Si así hubiera sido, los pilotos habrían incurrido de todas maneras en una infracción aduanera, ya que los equipos que son ingresados al país deben ser declarados ante la Aduana, dijo a este diario una fuente vinculada con la causa.

El caso llamó la atención, ya que Austral no realiza vuelos internacionales sino de cabotaje. Se trataba, en este caso, de un viaje excepcional, ya que los pilotos habían viajado para traer una avión recién comprado y habrían decidido no desperdiciar la oportunidad para comprar algunas cosas a menor costo.

Los técnicos de vuelo quedaron desvinculados de la causa. Pero el juez tiene puesta la mirada en los inspectores de Aduana, que no habrían visto un cargamento poco discreto, que incluía una enorme pantalla de televisión.