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En una mesa conformada por representantes de empresas encuestadoras y de proyección de datos, cuatro especialistas reafirmaron que los datos que surgen del Indec son absolutamente necesarios para su tarea. Esos datos, cruzados con los obtenidos por las encuestadoras, permitieron determinar, por ejemplo, que en un país de mayoría católica, “el 57,8 por ciento estaba a favor del aborto legal”, definió Doris Capurro, de la agencia Ibarómetro. Junto a ella, disertaron Gerardo Adrogué, director de Knack; Analía del Franco, directora de Analogías, y Enrique Zuleta Puceiro, presidente de Ibope OPSM.

Adrogué abrió la mesa para destacar la necesidad de los datos provistos por el Indec y el rol indelegable del Estado en la producción de estadísticas confiables. También se refirió a la necesidad de la confianza para el desarrollo de esas estadísticas y advirtió sobre campañas dirigidas a golpear esa confianza.

Del Franco explicó el uso de los datos del Indec y citó ejemplos prácticos, como la utilidad del “radio censal”, que se transforma en una herramienta para las encuestadoras.

Doris Capurro detalló que existe una articulación entre los datos duros provistos por el Indec con datos subjetivos que obtienen las encuestadoras. Así, en un estudio realizado para determinar el “espíritu y clima ideológico de los argentinos”, descubrieron que el 76,3 por ciento estaba a favor de que el Estado interviniera activamente y el 68 por ciento estaba a favor de que los juicios por lesa humanidad debían continuar.

Por su lado, Zuleta Puceiro defendió la función del Indec y propuso que se abriera la participación a ámbitos diferentes de los especialistas en estadísticas, como podrían ser los interesados en Educación, en Vivienda, los encuestadores mismos, para una estrategia que permita recuperar la confianza en las estadísticas.