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Comenzó ayer el primer juicio oral y público en el país por el “femicidio” de una persona trans. Las audiencias se realizan en Salta y son dos hombres los acusados de haber cometido el crimen en 2014.

Durante la primera audiencia, los dos imputados, Carlos “Eze” Plaza (20) y Juan José “Combo” Del Valle (37), se negaron a declarar por el asesinato de Gimena Álvarez (31), tras lo cual el tribunal hizo un cuarto intermedio para analizar un planteo de la defensa.

Los defensores oficiales solicitaron que se cite a declarar o se le realice una nueva Cámara Gesell al chico que fue testigo “clave” de los hechos.

Se trata de un niño que al momento del homicidio tenía 13 años y que limpiaba parabrisas a los vehículos en la zona donde ocurrió el hecho.

La Sala III del Tribunal de Juicio de Salta, presidida por la jueza Carolina Sanguedolce e integrada por sus pares Ada Zunino y Silvia Bustos Rallé, a cargo de este debate, rechazó el planteo y comenzó a escuchar las declaraciones testimoniales.

Los primeros testigos en declarar en la primera jornada fueron los tres policías que se encontraron con la víctima en el lugar del hecho y que comenzaron las tareas investigativas del caso.

Para hoy está programado el testimonio de los peritos intervinientes. Las audiencias se extenderán por lo menos hasta el 26 de julio próximo, para cuando están programados los alegatos de las partes y la sentencia.

Los acusados llegan a este proceso imputados por “homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas, criminis causa y por violencia de género”, en perjuicio de Gimena Álvarez, quien había cambiado su identidad sexual.

Por el Ministerio Público interviene en el proceso el fiscal Pablo Paz, mientras que la defensa de los imputados es oficial y está a cargo de Guillermo Polliotto y Jorge Bonetto.

Según consta en la causa, el 24 de diciembre de 2014, alrededor de las 6 de la mañana, los imputados se encontraban en la plazoleta Héctor Cámpora, ubicada en la intersección de avenida Jujuy y calle Esteco, en la zona sur del macrocentro de la capital salteña. En ese momento se acercó a hablar con ellos el adolescente que luego resultó ser el principal testigo de los hechos. El chico se dirigió luego a la calle La Rioja, donde se encontraba la damnificada, y la acompañó al sitio donde estaban Del Valle y Plaza, tras lo que los cuatro se dirigieron juntos hacia la calle Tucumán.

Allí, los imputados mantuvieron relaciones sexuales con la víctima y la golpearon hasta dejarla agonizando, tras lo que le sustrajeron dinero y un celular y, finalmente, la empujaron al canal de la calle Esteco, donde quedó gravemente lesionada.

La víctima fue asistida y trasladada de urgencia al hospital San Bernardo, donde falleció a las 23 de ese mismo día.

La autopsia determinó que el deceso se produjo como consecuencia de los golpes recibidos, que le provocaron un “traumatismo encéfalo craneano grave, post operatorio de craneotomía y trauma cerrado de tórax grave”.

Los voceros explicaron que para la detención de los autores del hecho fue fundamental el aporte del menor de edad que presenció los hechos, además de las imágenes registradas por las cámaras del sistema de Video Vigilancia y de negocios de la zona.

Gimena Álvarez tenía su DNI con el cambio permitido por la Ley de Identidad de Género, que, con el número 26.743, fue aprobada en 2011 y promulgada en 1012.

Se trata de la legislación argentina que permitió a las personas trans, o sea travestis, transexuales y transgéneros, inscribir en sus documentos personales el nombre y el sexo de su elección.