SOCIEDAD
Viaje desde Paraguay, cada dos meses
Por Mariana Carbajal
En el Centro de Rehabilitación que Fleni abrió en diciembre en Escobar, tienen por estos días un paciente de Paraguay. Es un chiquito de un año y medio, hijo de un matrimonio uruguayo que vive en Asunción. Sufrió una lesión cerebral durante el parto que le dejó secuelas en la parte motora. Desde enero, el pequeño y su mamá –y eventualmente el papá– viajan cada dos meses y se instalan en el complejo por varios días. “Cuando a los cuatro o cinco meses de vida de mi hijo nos dimos cuenta de su afección, empezamos a buscar dónde atenderlo. Tenía que hacerse una tomografía computada que por su edad requería anestesia. Buscamos referencias y las recomendaciones fueron coincidentes: nos dijeron que Fleni era el mejor lugar de la región”, contó la mamá, de 31 años, que prefirió no ser identificada. “Si no hubiese sido por la devaluación, hubiéramos tenido que hacer un esfuerzo enorme para pagar el tratamiento y comprar el equipamiento especializado que necesita para su recuperación, que en Paraguay no se consigue y lo tenemos que llevar de Argentina”, comentó la mujer. Durante su estadía en Buenos Aires, madre e hijo se alojan en los “dormis” que tiene Fleni en su sede de Escobar y el pequeño tiene dos horas de tratamiento por la mañana y una más por la tarde, en las que recibe sesiones de kinesiología, fonoaudiología, psicopedagogía y realiza terapia ocupacional. El tratamiento les cuesta 700 pesos por semana. En Paraguay lo completan con las directivas que se llevan de Fleni.