“La sociedad está pensando que a esta chica la agarraron en un baldío, que fue violada con violencia, pero no es así, fue un abuso intrafamiliar como ocurre en tantos casos. ¿Sabe la cantidad de chicas de 12 o 13 años, incluso de 9, que son abusadas por sus padres y quedan embarazadas? Veo un montón en mi juzgado y ellas no pueden abortar.” Así se refirió la jueza de Menores Nº 5 de La Plata, Inés Siro, al drama de la joven de 19 años, L.M.R, sobre cuyo caso se expedirá en las próximas horas la Suprema Corte bonaerense.

En una entrevista con Página/12, Siro defendió su resolución: “Mi sentencia no está fundamentada en convicciones religiosas. Es ajustada a derecho”, aseguró. El martes, en declaraciones a la prensa, la jueza había afirmado que para tomar la decisión “es difícil dejar de lado la formación jurídica y cristiana”. Su postura fue duramente criticada por el ministro de Salud, Ginés González García. Siro también había aclarado que le ofreció a la familia de la joven que “diera en adopción al bebé, pero los padres no quieren que lo tenga”.

–¿Por qué tomó intervención?

–La fiscal Leila Aguilar (titular de la UFI Nº 5 que actúa en la causa de violación de L.M.R.) me hace saber que se estaba por cometer un delito. La menor estaba internada en el Hospital San Martín y le iban a hacer un aborto. La fiscal me plantea que no estaba probada la violación ni que la chica fuera idiota o demente, como está previsto en el inciso 2º del artículo 86 del Código Penal. Por eso doy intervención a una asesora de incapaces en representación de la joven y a otra en nombre de la persona por nacer. Mi sentencia no está fundamentada en convicciones religiosas. Es ajustada a derecho. Yo no puedo dar autorización para delinquir, la práctica abortiva en este caso es un delito. Los médicos podrían haber efectuado el aborto.

–La jefa del Servicio de Ginecología del San Martín, que iba a realizar el aborto, afirmó que llegó al hospital un médico mandatado por el tribunal que ordenó suspender la intervención...

–No es así.

–No es lo que declaró la doctora Blanca Campostrini en una entrevista con este diario.

–Lo único que llegó al hospital es un oficio pidiendo un examen psiquiátrico de la joven. Pero ya la habían externado. Yo no ordené que la externaran. Yo estoy muy conforme con mi fallo, porque está dentro de lo que marca la Constitución. Yo defiendo el derecho a la vida desde la concepción. No evalúo si es o no un aborto eugenésico. Hago una intervención de protección a la víctima. Además, no está probado en la causa que sea idiota. Es una débil mental, pero anda con celular y se maneja sola por la calle. La sociedad piensa que a esta chica la agarraron en un baldío. No ha sido una víctima desamparada. No hubo violencia física

–¿Le parece menos grave?

–No, claro, es igual de grave. Pero fue un abuso intrafamiliar, como ocurre en tantos casos. ¿Sabe la cantidad de chicas de 12 o 13 años, incluso de 9, que son abusadas por sus padres y quedan embarazadas? Veo un montón en mi juzgado y ellas no pueden abortar.