Todos los días, en los 77 hospitales públicos bonaerenses, se realizan unas “90 intervenciones de aborto”, que en su mayoría intentan resolver prácticas iniciadas en ámbitos extrahospitalarios, afirmó ayer el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Claudio Mate. Muchos de esos casos provienen de “sectores muy desamparados.”

“Las estadísticas nos indican que anualmente se realizan entre 32 y 33 mil casos de abortos” en centros públicos, que incluyen los autorizados por la Justicia y en mayor medida prácticas iniciadas sin pericia médica ni medidas de asepsia.

“El prorrateo diario nos da aproximadamente unas 90 intervenciones de abortos que se realizan en hospitales de la provincia de Buenos Aires y en los 32 hospitales administrados por la municipalidades”, dijo.

El funcionario sostuvo que “hay muchos casos de interrupción de gestación provocados inicialmente para que luego los hospitales intervengan y ofrezcan a esa mujer una situación de mayor garantía y seguridad”.

Mate manifestó que se producen “veinte casos al año de mujeres que han fallecido en ese proceso de provocarlos en su domicilios o en instituciones clandestinas”.

“Yo tenía la preocupación inicial de que se tratara de chicas muy jóvenes, pero está prorrateado en distintos grupos de edades”, aseguró, y agregó que “son provenientes de sectores muy desamparados, desprotegidos en lo social y en lo económico”.

Para el funcionario “éste es uno de los puntos que tenemos que analizar en el debate que nos merecemos para resolver cuál es la normativa más prudente en términos de que no se produzcan más daños de los que se quieren evitar”, dijo.