El estudio propone incorporar a los vehículos nuevos y, de ser posible, a los ya existentes, “un limitador de velocidad a cien kilómetros por hora”. Enrique Filgueira, coordinador del equipo de la UTN, señaló que “nuestro informe se limita a los doble piso, pero entendemos que la norma se aplicará para todo vehículo de larga distancia”.

Para los vehículos que se fabriquen de ahora en más, el informe solicita incorporar el “doble eje delantero” (cuatro ruedas adelante), que brinda mejor “estabilidad”; “mejorar los materiales para disminuir su inflamabilidad”; “mejorar la resistencia de la estructura” y “de la cabina del conductor” y “limitar la capacidad de las bodegas de equipajes”. El informe señala “la importancia de una correcta colocación de las cargas y el equipaje”, incluyendo “la posición de los pasajeros”: en efecto, “un desplazamiento del centro de masas hacia atrás del 10 por ciento” disminuye el sostén lateral de la unidad “en casi un 50 por ciento”.