El platense tenía esperanzas en la previa, pero no pudo y se quedó fuera de los Juegos, tras perder en la categoría de hasta 75 kilos.

El boxeo argentino llegó a Beijing con un solo representante, pese a ser el deporte que más medallas conquistó a lo largo de la historia: 24 preseas, de las cuales siete fueron de oro, mismo número de plata y diez de bronce.

Claro que esta debacle deportiva no es de ahora, porque las siete preseas doradas se consiguieron entre los Juegos Olímpicos de Amsterdam 1928 y Londres 1948.

La última medalla del boxeo argentino en un Juego Olímpico la consiguió el mendocino Pablo Chacón, quien en Atlanta 1996 se quedó con el bronce.

Con esos antecedentes salió a pelear Maderna, quien encima enfrentaba a un rival que ya le había ganado en la final de los Juegos Panamericanos de Guatemala, que fueron clasificatorios para Beijing).

Desde el comienzo de la pelea dominó el estadounidense el centro del ring y de a poco comenzó a ganarle al argentino, quien nunca le encontró la vuelta a la historia. Al finalizar el primer round Maderna ya perdía 3 a 0, todo se le hizo cuesta arriba y al final terminó siendo superado por un 10-2 inapelable.