Luego de más de 14 horas de debate, la iniciativa fue aprobada en general por 162 votos contra 75, con un fuerte respaldo del bloque oficialista y de varias bancadas de la oposición que apoyaron en general el proyecto enviado el pasado 21 de octubre por el Poder Ejecutivo.

El titular del bloque del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, aseguró al cerrar el debate que se trata de "una de las medidas estructurales más trascendentes" que ha tomado el gobierno nacional y calificó de "perverso" el sistema de capitalización privado.

"Nos prestaban la plata misma de los argentinos y nos cobraban intereses. Seguir sosteniéndolo era una gran tontería", enfatizó Rossi, quien destacó además las modificaciones introducidas al proyecto oficial como producto del debate en comisión.

En el debate en particular, en tanto, los diputados introdujeron una modificación al artículo 14, a través del cual se busca "garantizar el empleo a los trabajadores no jerárquicos de las AFJP que opten por incorporarse al Estado" en cualquiera de las dependencias "con reconocimiento de la antigüedad".

Al abrir la discusión, el titular de la comisión de Previsión Social, Juan Carlos Díaz Roig, defendió el sistema "solidario" de reparto y afirmó que el sistema de capitalización "fracasó" porque resultó inviable "macroeconómicamente pagar a los jubilados y al mismo tiempo ahorrar".

El proyecto logró un fuerte respaldo oficialista y de bloques opositores como los ex aristas del SI y Proyecto Sur de Claudio Lozano, que acordaron con el oficialismo varios de los cambios introducidos al proyecto original presentado por el Poder Ejecutivo.

En su discurso, Lozano anticipó su respaldo en general a la iniciativa aunque aclaró que "no hacemos oposicionismo, tenemos convicciones y pensamientos; no somos parte del sistema de canje por cargo alguno", al recordar que apoyó desde el comienzo del debate en comisión el espíritu de la norma.

Otra bancada opositora que anunció su respaldo en la votación en general al proyecto fue el Partido Socialista, que también comprometió su apoyo para la votación en general.

Al promediar la sesión, se produjo un fuerte cruce entre la diputada del Solidaridad e Igualdad (SI) María América González y su par de la Coalición Cívica, Patricia Bullrich, que polemizaron a los gritos en el recinto y se diferenciaron por sus posiciones a favor y en contra, respectivamente, del proyecto oficial.

"Voy a votar la ley porque no soy ninguna señora que le recortó el 13 por ciento a los jubilados. Ella cuando tenía que defenderlos dejó el traste sentado en la banca", enfatizó María América, acusación que fue refutada por la propia Bullrich, que rechazó fuertemente ese cuestionamiento.

El proyecto recibió dictamen el martes en un plenario de comisiones, donde se introdujeron varias modificaciones que principalmente apuntaron a garantizar que los recursos acumulados por las AFJP podrán ser utilizados únicamente para pagos de los beneficios del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).

También, el diputado Hugo Prieto, del Partido De la Concertación, manifestó su respaldo, al proyecto al destacar que "con la aprobación de esta ley, daremos otra vuelta de página en la historia para reconstruir los maltrechos vínculos de solidaridad en materia provisional".

Mientras se desarrollaba el debate, organizaciones sociales marcharon frente al Congreso en respaldo al proyecto y defendieron la decisión del Poder Ejecutivo de eliminar el sistema de capitalización privada.

La oposición, en tanto, reiteró los argumentos en contra del proyecto y coincidió en lamentar el poco tiempo que tuvieron los legisladores para analizar la iniciativa.

En ese sentido, el presidente del bloque radical Oscar Aguad reclamó por el hecho que los cambios al sistema previsional sean tratados en una sesión especial, por entender que se está "cercenando el derecho de las minorías", que no participan de las comisiones que redactaron el dictamen de mayoría.

Desde el bloque del PRO, el diputado Luis Galvalisi cuestionó que se "discuta en tan poco tiempo una ley que constituye una política de Estado" y advirtió que hubo "ponencias y exposiciones, pero no un análisis de fondo".