Sábado, 20 de marzo de 2010 | Hoy
18:04 › PARA LA RECONSTRUCCIóN TRAS EL TERREMOTO
El presidente de Chile anunció que aplicará durante su gobierno "una economía de guerra", para lo cual firmó un decreto de austeridad pública con el fin de afrontar las pérdidas causadas por el terremoto del 27 de febrero, que situó en 30 mil millones de dólares.
"Firmé el decreto y entrará en ejecución una profunda austeridad en el gasto público. Vamos a establecer una economía de guerra (...) en el sentido de austeridad hasta que duela", anunció el mandatario durante un encuentro con pobladores de la comuna de Estación Central en Santiago, según reportaron las agencias de noticias DPA y Ansa.
Piñera explicó que esta política será necesaria para afrontar las pérdidas que dejó el terremoto, sobre las cuales reiteró que ascienden a 30 mil millones de dólares, y resaltó que además el país dejará de producir alrededor 1700 millones de dólares por la destrucción del aparato productivo en las zonas afectadas.
De esta manera, el mandatario restó validez a la estimación de Matías Braun, doctor en economía de Harvard, quien dijo que las pérdidas fueron sólo de 8 mil millones, un 73,33 por ciento menos que la estimación oficial.
El presidente describió que las pérdidas obedecen al impacto sobre el sector público y privado, y se refieren tanto a daños estructurales como menores. En el área pública será necesario reconstruir o reparar hospitales, colegios, obras públicas, de regadío y patrimonio cultural, agregó.
De acuerdo con los cálculos del gobierno, el ajuste en el sector público permitirá ahorrar unos 730 millones de dólares anuales, que serán integrados a un fondo para la reconstrucción que estará operativo en los próximos cuatro años.
"Hemos planteado un recorte general de gastos en las partidas correspondientes a bienes de consumo y compra de equipos y maquinarias en todos los ministerios de un 5 por ciento", precisó.
Además, indicó que habrá programas que serán postergados por el cambio en las prioridades de la administración, como la remodelación del Estadio Nacional, pero recalcó que la postergación no alcanzará a la inversión social.
"Vamos a reinaugurar el Estadio Nacional con todas las obras de remodelación que se han incorporado. (El resto) puede esperar más de lo que puede esperar la creación de 60.000 empleos de emergencia para la gente que va a perder su trabajo", sostuvo.
"Todo lo que va en beneficio social de nuestros sectores más necesitados y de nuestra clase media necesitada se van a mantener inalterables e incluso, en muchos casos, se van fortalecer", precisó.
Por otra parte, destacó que entre 5000 y 8000 millones de dólares serán recuperados por los seguros que Chile tiene contratados en el exterior. También señaló que recurrirá a las ganancias por el mayor precio del cobre y reiteró la posibilidad de un "ajuste tributario" a las grandes empresas. El jefe de Estado anunció, además, que sacará una ley de donaciones para motivar a los privados a hacer su aporte en el proceso de levantar a Chile.
Los anuncios hechos hoy por el presidente chileno se suman al uso moderado de los ahorros del país andino, el aumento de la deuda pública y reajuste tributarios como vías de financiamiento que el gobierno mantiene en estudio para ayudar a los cerca 800.000 damnificados del terremoto.
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