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"Todo el mundo en la organización conoce mi propuesta de que se haga ya, lo más rápidamente posible, pero son los países miembros los que tienen que decidir", dijo el ex ministro chileno en declaraciones difundidas por el mismo organismo.

Insulza hizo declaraciones al hablar con la prensa hondureña, país donde se encuentra tras asistir a la instalación de la Comisión de la Verdad, la que se encargará de investigar el golpe de Estado del 28 de junio de 2009.

Insulza negó que existan gobiernos en las Américas "que vayan a desconocer la legitimidad del gobierno de Honduras". Según el funcionario "algunos gobiernos han planteado que, dada la gravedad que asignan a lo que ocurrió, es necesario tomar una decisión con más calma, demorar algo más de tiempo. Pero no creo que esto se prolongue por mucho tiempo".

A pesar de las palabras de Insulza, la Cumbre de Jefes de Estado de la Unasur que se realizó ayer en Buenos Aires puso en evidencia las dificultades que enfrenta el tema Honduras para decidir en forma consensuada una pronta readmisión.

Una semana después del golpe de Estado, Honduras fue suspendida de la OEA y hasta el momento no ha sido readmitida en el organismo. El nuevo gobierno del presidente Porfirio Lobo fue reconocido por algunos gobiernos de la región, pero enfrenta el rechazo de la mayoría de las naciones de Sudamérica.