Los letrados Ricardo Rozental y Santiago Fedel fundamentaron la solicitud de declaración de la causa en el hecho de que habría sido un agente de la Secretaría de inteligencia (SI) quien habría efectuado la llamada que alertó a Sergio Burstein, dirigente de la Asociación de Familiares del Atentado a la AMIA, de que sus teléfonos estaban "pinchados".

En un escrito de seis carillas la defensa de Macri insiste en que si un agente de la SI fue quien avisó a Burstein, cometió un delito al revelar un secreto y, por ende, a partir de ahí todo debe ser declarado nulo.

Sin embargo, Hugo Alvarez, el agente de la SI al que Macri atribuye la llamada, al declarar días atrás ante Oyarbide, negó haber efectuado esa comunicación y aseguró que "no conoce a ninguno de los imputados", en esta causa.

Si el magistrado rechaza el planteo, esa resolución puede ser apelada por los defensores de Macri y el expediente volvería, de ese modo, a la Cámara Federal donde Macri ya tuvo resultados adversos en distintos intentos por apartar a Oyarbide.