"Vamos a seguir trabajando comunidad por comunidad. Ya hay varias escuelas que han levantado la toma y hoy estamos en menos de 10 edificios y 11 escuelas, con lo cual el trabajo que venimos realizando está siendo efectivo y vamos a seguir", señaló Bullrich.

El funcionario porteño dijo que lo que se está haciendo desde el ministerio a su cargo es "sentarnos con cada comunidad y abrir un canal de diálogo con docentes y alumnos", aunque reconoció que el hecho de que algunos chicos pudieran ver afectado su ingreso a la universidad, si tenían que recuperar clases en febrero, fue un "factor" para que comenzaran a levantar las tomas. En ese sentido, ratificó en declaraciones a radio Uno que los chicos "van a recuperar" los días de clase perdidos por las tomas, precisó que dos escuelas "tendrán clases hasta el 30 de diciembre" y que con cada comunidad escolar "se está definiendo el nuevo calendario".

En tanto, la Coordinadora Unificada de Estudiantes Secundarios (CUES) calculó en doce los colegios que seguían tomados esta mañana y ratificó que evaluará esta tarde continuar con las ocupaciones o levantar la medida, en una reunión con inicio programado para las 17 en la sede de Marcelo T. de Alvear de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.

En cuanto a la movilización prevista para el jueves al Ministerio de Educación, Bullrich dijo que "el derecho a marchar lo tienen, pero el ministerio se reúne con las comunidades escolares en cada una de las escuelas".

A modo de autocrítica, el funcionario porteño dijo que tendría que haber concurrido personalmente antes a la Legislatura. "Está claro que cuando fui a la Legislatura y se votó la ley rápidamente para darme los fondos adicionales el 5 de agosto, pudimos ejecutar las obras, y las tomas empezaron una semana después de esto", consideró.

Por último, afirmó que tomó este conflicto con "serenidad y templanza", que nunca sintió la "necesidad de dar un paso al costado" y sostuvo que "el camino de salida estaba claro, y había que mostrárselo a los chicos".