Sólo 38 diputados votaron en contra y, en total, 293 legisladores participaron en el sufragio, según informó el presidente del Parlamento, Filipos Pechalnikos.

La mayoría estaba asegurada antes de iniciar el debate por el respaldo seguro de los legisladores por el socialista movimiento Pasok, los conservadores de Nueva Democracia y los ultraderechistas de Laos, que son parte del gobierno de coalición formada el viernes pasado.

Aunque, sorpresivamente, dos diputados del Pasok y otro de Nueva Democracia le negaron la confianza al Gobierno, que consiguió el apoyo de cinco legisladores de otros grupos minoritarios compensaron esas defecciones.

Antes del voto de confianza, Lucas Papademos, solicitó a los diputados que apoyasen la "tarea titánica" que tiene por delante el Ejecutivo para enderezar la economía y alejar a Grecia del peligro de salir del euro. "Cada uno de los votos a favor es equivalente a una decisión responsable para que no está en peligro la permanencia de Grecia en la zona el euro y para el progreso de la economía", aseguró. "Los problemas empeorarán si Grecia no participa en la zona del euro", amenazó el exvicepresidente del Banco Central Europeo (BCE).

El mandato del nuevo Gobierno se limita a ratificar el segundo rescate acordado con la eurozona por 130 mil millones de euros, además de la quita del 50 por ciento de la deuda privada, y lograr liberar los 8 mil millones de euros pendientes de pago del primer paquete de ayuda antes del 15 de diciembre.

Para lograr ese objetivo, el nuevo Gobierno debe ratificar las impopulares medidas exigidas por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional antes de que los prestamistas liberen los recursos que eviten la suspensión de pagos.