En su discurso de los sábados, Barack Obama reiteró sus condolencias a los familiares de las víctimas y declaró cuatro días de duelo nacional. En tanto, los investigadores revelaron que, según los primeros datos y contrario de lo que se dijo ayer, el causante de la masacre no entró libremente en el colegio Sandy Hook, sino que forzó el acceso. Y, según NBC News, tres armas utilizadas en los disparos fueron adquiridas legalmente y registradas a nombre de la madre de Lanza.

El portavoz policial George Sinko dijo al diario "Newtown Patch" que por el momento se desconoce qué movió a Adam Lanza a actuar así. Lanza se suicidió, después de haber matado a su madre, que era profesora en la escuela donde perpetró el tiroteo.

Los investigadores, además, precisaron que 18 niños murieron en el colegio y otros dos en el hospital, debido a las graves heridas. Entre las víctimas adultas estaban el director y la psicóloga de la escuela.

En la pequeña ciudad de Newtown, los habitantes están aún conmocionados con la peor masacre perpetrada en una escuela en la historia de Estados Unidos. Los familiares de las víctimas pidieron que se respete su privacidad. Para ello, a cada familia se le asignó un agente de policía.

Desde Roma, Italia, el papa Benedicto XVI calificó la matanza de "tragedia absurda" y expresó en un telegrama al obispado de Bridgeport, en Connecticut, sus profundas condolencias. En el texto, que subraya que el pontífice fue informado de inmediato de los hechos, se añade que el religioso pidió a Dios que consuele a los sobrevivientes.