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La reina de los Países Bajos, Máxima Zorreguieta, llegó poco antes de las 12.30 a la residencia de Olivos para mantener un almuerzo privado con el presidente Mauricio Macri, en lo que será el cierre de su visita al país, que tuvo ayer una agenda cargada de reuniones y conferencias de prensa compartidas con gran parte del Gabinete de Cambiemos.

En la previa del almuerzo, Máxima ofreció una conferencia de prensa acompañada por la vicepresidenta Gabriela Michetti para continuar predicando su trabajo como asesora especial de Naciones Unidas en temas de “inclusión financiera para el desarrollo”. La hija de Jorge Zorreguieta (secretario de Agricultura durante la dictadura cívico-militar) precisó que trabaja junto al Banco Mundial para alcanzar la meta de la universalización en el acceso a la bancarización.

Zorreguieta se mostró de acuerdo con el objetivo de "bajar la inflación para alcanzar la estabilidad macroeconómica" al considerarlo "esencial" para establecer una "estretegia nacional de inclusión financiera". La reina y asesora de la ONU señaló que en la Argentina "sólo el 50 por ciento tiene acceso a una cuenta bancaria" y de ellos el 44 por ciento pertenece a los sectores de bajos recursos.

Además, indicó que los ahorros de los argentinos representan el 15 por ciento del PBI del país, cuando en la región el promedio alcanza el 41 por ciento, y resaltó que "los créditos a las pymes son el 3 por ciento del total, el más bajo de toda la región".

La reina holando argentina agradeció la "hospitalidad del gobierno argentino" y aseguró que su tercera visita al país en calidad de asesora de la ONU en "inclusión financiera" fue positiva en materia de reuniones con los funcionarios del gobierno nacional y representantes del sector privado.

Zorreguieta remarcó la necesidad de alcanzar la conectividad en todo el país y el acceso a través de teléfonos inteligentes para ampliar la "inclusión financiera" y destacó el caso de Kenia, donde "el 62 por ciento de la población recibe microcréditos vía celulares".