Acindar, principal productora de acero no plano de Argentina, confirmó que el accidente ocurrió cerca de las 10.45 en el horno número 4 de la planta de Villa Constitución, a 50 kilómetros de Rosario, cuando operarios realizaban "tareas de rutina, bajo estrictos controles de seguridad".

Bomberos y Policía explicaron que el horno eléctrico explotó cuando personal de la empresa contratista Serkay y de Acindar se encontraban cambiando ladrillos refractarios, lo que generó una fuga de agua y vapor de agua hirviente a presión, que impactó contra las personas ubicadas en su interior.

Los trabajadores sufrieron quemaduras de primer, segundo y tercer grado, y fueron trasladados en varias ambulancias de la empresa, seis al Hospital "SAMCO Rivadavia", de Villa Constitución, y los restantes a un centro de salud de Rosario.

Nicolás Correa, de 22 años, y Alfredo Dianda, dos operarios heridos, presentaban quemaduras graves "en 75 por ciento" del cuerpo, por lo que fueron llevados al Instituto del Quemado del Sanatorio Británico de Rosario, informó el director del hospital, Osvaldo Fredy.

Correa "tiene una fractura de su brazo derecho" y Dianda "un severo traumatismo de cráneo frontal", precisó Fredy, mientras fuentes médicas del Hospital Rivadavia expresaron que los otros seis obreros "tienen politraumatismos", aunque ninguno de ellos se encuentra en estado grave.

Fuentes de la empresa citadas por la prensa local explicaron que el siniestro se produjo a causa de una "falla en el sistema refrigerante del horno número cuatro" y reconoció que uno de los heridos "tiene quemaduras en gran parte del cuerpo".

Los empleados nucleados en la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de la planta "Arturo Acevedo" de Acindar iniciaron tras el accidente un "paro total de actividades" por 24 horas hasta mañana a las 14, "en demanda de mayores medidas de seguridad".

"Hemos requerido la creación de una Comisión de Higiene y Seguridad mixta y el mejoramiento de la situación de las empresas contratistas, siempre hay presiones a los compañeros de las empresas contratistas que prestan servicio en la planta", advirtió el dirigente de la Seccional de la UOM, Pedro Parada.

El delegado denunció que los operarios heridos "tuvieron que meterse a las 10 de la mañana en uno de los hornos que estaba apagado desde las 6, cuando tendrían que haberse esperado unas 20 horas para que se realice el proceso de enfriamiento".

El gerente de Asuntos Externos de Acindar, Jorge Vaccaro, manifestó que "la seguridad es prioritaria para la empresa y lo acaecido es un hecho lamentable, tenemos personal investigando el accidente y se ha dispuesto acompañar a los trabajadores que están heridos".

Vaccaro, en diálogo con varios medios nacionales, expresó que se registró "una acumulación de presión debajo de la planchada" aunque "no debería acumularse presión en ese lugar", y reiteró que la acería "está certificada" y "cumple estándares para poder operar".

Trabajadores de la UOM añadieron que la junta interna había acordado un tiempo de enfriamiento de los hornos de 24 horas, que la empresa no habría respetado.

Si bien el sindicato metalúrgico aseguró que el paro comenzó en la planta de Acindar una vez conocido el incidente, Vaccaro dijo que la planta "está funcionando normalmente".

Imágenes de la fábrica emitidas por un canal de noticias porteño dieron cuenta que la explosión y la onda expansiva provocaron serios destrozos en el lugar del incidente, con máquinas y hierros destruidos.

La cotización de las acciones de Acindar cayeron hoy 3,45 por ciento, lo que constituyó una de las más importantes bajas de la jornada en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.

Fuente: DyN