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Estaban programados para hoy medio centenar de vuelos por parte de los países de la Unión Europea (UE). Estados Unidos también prometió el envío de aviones a la zona. Las tareas de evacuación se vieron sin embargo limitadas ante la falta de capacidad de los aeropuertos tunecinos. El aeropuerto de la

isla de Djerba está prácticamente desbordado.

La llegada de refugiados a la frontera con Túnez disminuyó considerablemente en las últimas horas. Ayer, llegaron a la zona 2 mil refugiados, tras los 15 mil que arribaron el miércoles.

"La situación es definitivamente mucho mejor que en los días pasados", aseguró la portavoz del programa de alimentos de la ONU, Abeer Etefa. Sin embargo, no está claro si esa disminución de la afluencia de refugiados se debe a que hay menos gente que quiere abandonar el país o a un posible acoso por parte de las fuerzas leales al líder libio, Muammar Khadafi.

La Comisión Europea se mostró "muy preocupada por la situación humanitaria en la parte libia de la frontera", aunque aseguró que la "evacuación está en marcha". Bruselas coordina el puente aéreo y marítimo en el que participan los países europeos involucrados en las tareas de repatriación.

Cooperantes alemanes informaron por su parte de las penosas condiciones en las que se encuentran los exiliados en la frontera libio-tunecina. "La situación en la zona es tensa, falta lo más básico", dijo uno de los cooperantes de la ONG alemana I.S.A.R. Naciones Unidas y la Cruz Roja advirtieron por su parte de una posible catástrofe humanitaria en la zona.