Para esta tarde, cerca de las 18, fue convocada una reunión por la Mesa de Unidad Sindical de Santa Cruz y el obispo local, Juan Carlos Romanín para todos los sectores políticos y sociales de la provincia con la intención de hallar "un camino de solución al conflicto" que enfrenta a trabajadores y gobierno.

El encuentro, del que ya aseguraron su presencia el radicalismo y el socialismo, busca destrabar el clima de extrema tensión que se vive en Río Gallegos tras el incidente que protagonizó Varizat.

Sin embargo, el obispo Romanín ya anticipó que participará de la marcha convocada para mañana a las 16.30 por la Mesa de Unidad Sindical para reclamar justicia por las personas heridas por Varizat y también por aumentos salariales.

La dimisión de Roque era una exigencia que los gremios estatales de Santa Cruz planteaban desde el 9 de mayo último, cuando el comisario encabezó la represión contra empleados municipales que reclamaban aumentos salariales, con un resultado de 15 personas heridas.

En tanto, el Secretario General de ADOSAC, Pedro Muñoz, ratificó el paro de mañana y la idea de ampliar la huelga hasta el viernes, que inclusive, "es un pedido que está llevando adelante la Asamblea de docentes de Río Gallegos".

"Vamos a tener el Congreso provincial el martes, donde van a venir los mandatos de todas las seccionales, de las demás filiales, pero, por lo pronto, cada vez que ocurre un hecho de esta naturaleza pedimos una ampliación de la medida a nivel nacional", manifestó.

Finalmente, seguía internada en estado delicado la docente Marta Guillarmaz, de 52 años, la única grave de las 17 atropelladas por la camioneta de Varizat.

Muñoz consignó que "el último parte es que sigue en estado crítico, pero está estabilizada, no está todavía fuera de peligro pero no se ha agravado la situación".

Fuente: DyN