Por sorpresa, la sede de Merlo del Ciclo Básico Común (CBC) de la Universidad de Buenos Aires (UBA) fue cerrada definitivamente. La municipalidad del partido bonaerense que comanda Raúl Othacehé tomó la decisión de no permitir su uso por problemas edilicios. En rechazo, estudiantes y docentes se movilizaron y, desde ayer, mantienen ocupado el edificio. Las autoridades de la UBA le enviaron una carta documento al municipio para que dé explicaciones porque “no cumplió con los términos formales del acuerdo” entre la universidad y Merlo, y “que por lo tanto fue una medida unilateral”.

Recién este miércoles, un día antes de comenzar la cursada, la comunidad educativa de la sede del CBC supo que no se iban a abrir sus puertas. La decisión llegó a través de una comunicación telefónica del municipio que adujo “problemas edilicios” para fundamentar la medida. “Al llegar a la sede, a los alumnos los esperaba el personal administrativo que les explicaba que tenían que reinscribirse para derivarlos a sedes de Capital”, contó a Página/12 María Damasseno (MST), presidenta de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA). “Esta es una política de ajuste contra el CBC –agregó–. El año pasado hicieron algo parecido con la sede de Tucumán, cuando los alumnos fueron trasladados al edificio de Bulnes. La sede Merlo no se puede cerrar porque sería casi una expulsión de los estudiantes de la UBA.”

La universidad tenía firmado con el municipio de Othacehé (PJ) un convenio por el cual la UBA ponía al cuerpo docente, conformado por cerca de 500 profesores, y la comuna se hacía cargo de la manutención del edificio. Allí hay al menos 3500 alumnos anotados para cursar que se toparon con el anuncio municipal en su primer día de clases. Por ello, la FUBA y la Asociación Gremial Docente (AGD) se acercaron ayer a la mañana para realizar una asamblea. Decidieron permanecer en el interior de la sede y dar clases con normalidad, mientras buscaban una salida al conflicto. En principio, también resolvieron impedir la reinscripción de los alumnos en otras sedes.

Según un comunicado de la AGD, la comuna de Merlo esgrimió que la UBA “habría propuesto un nuevo convenio, según el cual el municipio debería hacerse cargo de los salarios docentes”. Por ello se presentó el encargado de las sedes del CBC, Carlos Ferronato, quien “desestimó las razones argumentadas” por la intendencia. Docentes y estudiantes pidieron que “las autoridades de la UBA hicieran pública esta situación y que, al mismo tiempo, adhirieran a la decisión de la asamblea de mantener abierta y en pleno funcionamiento la sede de Merlo”.

El secretario general de la UBA, Carlos Más Vélez, anunció ayer que “por una decisión unilateral de la comuna de Merlo, el convenio (...) quedó sin efecto”. También dijo que la casa de estudios había enviado una carta documento a las autoridades comunales para “pedir precisiones” sobre la medida. El funcionario garantizó la continuidad laboral de los docentes y no docentes, así como la reubicación de los alumnos. Fuentes del rectorado aseguraron a este diario que ya se estaba encaminando “un nuevo convenio con el municipio de Moreno, con condiciones mucho mejores que las de Merlo, y donde se respetaría la zona, para mudar las instalaciones el próximo cuatrimestre”.

En la asamblea de la tarde, los sectores movilizados definieron permanecer toda la noche en el edificio hasta hoy a la mañana. A las 8 emprenderán una movilización por la avenida Libertador hasta la municipalidad para pedir explicaciones. Luego, a las 18, otra vez marcharán a la sede del municipio con los alumnos del turno vespertino. “La primera marcha es a la mañana porque en ese horario esperamos encontrar a alguien que nos dé una respuesta. La otra es a la tarde porque es cuando hay mayor cantidad de alumnos y pueden ir algunos padres que están muy preocupados”, aseguró una alumna del CBC. Los docentes se sumarán al paro y las medidas que Conadu Histórica realizará el lunes (ver aparte).