Fútbol violento

La violencia en el fútbol se ve favorecida porque el Estado nacional viene incumpliendo la correlación entre deberes y derechos que tiene jerarquía constitucional desde agosto de 1994. Ella lo obliga a adoptar un código de conducta de las hinchadas, que establezca puntajes a favor, en caso de conductas positivas, y puntajes negativos, para las conductas negativas que se quieren desactivar. El sistema tendría incidencia en el resultado de cada campeonato, sea respecto de los primeros puestos o de los últimos. El sistema será aplicado por un nuevo fuero deportivo letrado, integrado por jueces independientes e imparciales, es decir, no designados a dedo como sucede actualmente, el que además, con garantías, juzgará las restantes infracciones que se cometen en el fútbol por distintos participantes.

Angel F. Di Paola.
Abogado.
DNI Nº 4.174.681

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Botnia

El arte es belleza porque puede transformar las pulsiones. El Guernica muestra el horror de la guerra, pero no es el horror, es la elaboración, es una cierta armonía que se logra y que hace que perdure y que el artista pueda expresar más allá de lo personal lo que toca a lo humano. El paisaje está intervenido por lo social y no tuvo siempre el mismo sentido. ¿El sentido de la vista es menos importante que el auditivo o el olfato? Cuando se habla de la pastera Botnia, poco se dice de la belleza perdida del paisaje, de la herida subjetiva que la construcción, esa fealdad enarbolada con desprecio, crea en los habitantes. ¿Será porque no es cuantificable en dinero? Es hora de pensar que el disfrute de la belleza es cosa de ricos. ¿Podríamos imaginar esa mole en Punta del Este? No. ¿El tercer mundo tiene que optar entre la comida y la belleza? ¿No habrá forma de juntarlas? ¿El elemento de agresión en la destrucción de un paisaje, cómo se mide? Recuerdo que casi todas las veces en que se da comida o ropas, a los que no la tienen, se lo hace desprovisto de cualquier intento de embellecer esos actos. Debemos que preguntarnos por qué y si aun por razones egoístas no convendría cambiar. La belleza abuena.

Cristina Villanueva.
DNI 4.892.444