DEPORTES › PELLEGRINI, DE CARA AL PARTIDO CON INDEPENDIENTE
“Nunca pienso en empatar”
El entrenador de River pasa, como su equipo, por un momento difícil: con dos derrotas y dos empates como últimos resultados, sin gol y a cinco puntos del puntero, se la juega el domingo.
El ingeniero Manuel Pellegrini es un hombre tranquilo. Siempre parece saber de qué se trata. Tiene mirada serena, convicciones firmes y palabra reflexiva. No alza la voz en la celebración o el reproche, no subestima a rivales, no es jactancioso ni altisonante en las victorias; tampoco es de señalar responsables a los suyos cuando le toca perder. Le gusta el juego, tiende a no dramatizar, muestra las características del profesional capaz y las cualidades propias de la persona de bien. En fin, se merece lo mejor. Y de lo mejor que le puede pasar a un entrenador es dirigir a un grande como River, con tan buenos, jóvenes y capaces jugadores aptos para el juego ofensivo. Hasta ahí, lo que uno puede describir, especular y considerar de afuera. Pero no es todo. Claro que no: están los resultados.
Porque aunque todo lo anterior sea cierto (y lo es), River, sucesivamente, perdió con Racing y Huracán y empató con Arsenal y Talleres; de gallardo puntero quedó a cinco de Independiente y debajo de Boca. No es fácil la vida del entrenador. El lunes salió el presidente Aguilar a respaldarlo. Y ayer, al mediodía, tras la práctica, en Ezeiza y en el día de su cumpleaños 49ª, habló él, tranquilo y con convicciones. Esto es, sintéticamente, algo de lo que dijo en la inminencia del partido del domingo con el puntero:
- No al empate: “Jugaremos ante el mejor equipo del campeonato. Está muy avalado lo que está haciendo Independiente por los puntos que tiene. River tratará de hacer su juego y saldremos a buscar la victoria, porque nunca pienso en empatar”.
- Mal de muchos: “La situación la veo igual que después del uno a uno ante Talleres. No necesitamos más horas para ver la realidad. Dejamos escapar dos puntos muy importantes como local y quedamos lejos de Independiente. La semana pasada frente a Arsenal, con el cero a cero, pasó lo mismo. Esto le pasa a muchos equipos, pero estoy convencido de que vamos a salir adelante. Es una mala racha y nada más que eso”.
- La base está: “Acá siempre jugó una base estable y ahora no nos vamos a volver locos haciendo cambios. Nunca lo hicimos. La mayoría de las variantes fueron por suspensiones o lesiones”
- No es para tanto: “El cambio en el funcionamiento de River fue positivo, aunque nunca pensé que iba a ser algo trascendental. Lo que necesitamos es tranquilidad para resolver las situaciones de gol que creamos. Soy muy autocrítico pero no anda todo tan mal: en el último partido, Luis Islas fue la figura”.
- El apuro: “Es verdad que no estamos ligando, como dicen los jugadores, pero también hay un exceso de aceleración que nos impide definir con claridad las jugadas”.
- El rival: “Llegamos con demasiada desventaja. Tenemos que buscar los tres puntos y salir a jugar como River. Tenemos que realizar nuestro planteo al margen del rival. No pienso en Independiente y los antecedentes no sirven para nada. Ellos deberán ratificar lo que vienen haciendo y nosotros mejorar nuestro nivel. Ojalá sea un buen partido”.
- El presidente: “Con Aguilar la comunicación es muy fluida. Sabe de nuestro trabajo. Ojalá que salgamos campeones, pero no siempre se logra. Mientras sigamos pensando lo mismo, trabajaremos bien. Ahora, si perdemos diez partidos seguidos...”
Con ese toquecito de humor negro –una especie de conjuro para alejar la mufa, acaso– el ingeniero terminó sus reflexiones en voz alta. No dio el equipo para el domingo y sólo una cosa dejó en claro: Martín Demichelis volverá al fondo y saldrá Gabriel Pereyra. En dos puestos clave, no se pronunció, aunque íntimamente tal vez lo tiene decidido: Guillermo Pereyra o Astrada en el centro del campo y Cavenaghi o Fuertes de punta por el medio.
Así, al día de hoy, Pellegrini ante Independiente arrancaría con Comizzo; Garcé, Ayala, Demichelis y Rojas; Luis González, Pereyra o Astrada, Zapata y D’Alessandro; Domínguez y Cavenaghi o Fuertes.