Omar Narváez buscará esta tarde dar un nuevo paso al frente rumbo a la historia. Desde las 17, y con transmisión en vivo de TyC Sports, el invicto campeón chubutense expondrá por 13ª vez su título de los moscas de la Organización Mundial de Boxeo ante el español Iván Pozo. El combate tendrá lugar en el Pabellón Central de la ciudad de Vigo, España, y de ganar, Narváez quedará a una sola pelea de igualar el record de 14 defensas exitosas que Carlos Monzón hizo de su corona de los medianos entre 1971 y 1977.

Cada vez que se habla de Narváez en el ambiente del boxeo, se destaca su talento y se duda de su condición física. Hoy vuelve a suceder lo mismo. Es uno de los pocos púgiles argentinos –si no el único– que puede asegurar victorias fuera del país. Pero las lesiones que acumula en su puño zurdo (se fracturó la muñeca en un accidente motociclístico en 2003 y en 2006, se fisuró el metacarpiano en la pelea contra el colombiano Walberto Ramos en el Luna Park) obligan a la prudencia a la hora de la previa.

Es más: esta pelea debió haberse celebrado el 11 de abril pasado. Pero se pospuso casi un mes por una tendinitis en la muñeca izquierda que lo aquejó a Narváez durante sus entrenamientos en Córdoba. Si el chubutense, que llega con un record de 26 victorias (16 antes del límite) y 2 empates, sube entero al ring y puede afirmar sus golpes, es candidato al triunfo por su boxeo veloz y variado y por su mayor fogueo internacional (de sus 12 defensas anteriores, 5 fueron en el exterior). En su última defensa, el 25 de enero ante el colombiano Carlos Tamara en Puerto Madryn, rayó a gran nivel, señal de que todos sus atributos técnicos están intactos.

El español Pozo, por su parte, tiene 28 años de edad y ostenta 28 victorias (18 por fuera de combate) y 4 derrotas, dos de ellas por nocaut. Ganó en 2004 y perdió en 2006 el título europeo de los moscas ante el italiano Andrea Sarritzu, dos veces adversario de Narváez, y también registra una derrota ante el francés Brahim Asloum, otro de los vencidos por el chubutense y actual campeón minimosca de la OMB. En el comienzo de su campaña peleó como supermosca y gallo, y en los videos suyos que han circulado por estos días en Buenos Aires se lo ha visto como un boxeador frontal y de ataque persistente. A esa tenacidad y a su condición de local apostará Pozo para frenar esta tarde la marcha triunfal de Narváez hacia el record de Monzón.