El cortocircuito desatado entre el ídolo de River, Ariel Ortega, y el entrenador del equipo, Diego Simeone, podría comenzar a resolverse mañana cuando el presidente de River, José María Aguilar, regrese al país de su viaje a Paraguay, donde asistió a una cumbre de la Conmebol, y se siente a dialogar con las partes para intentar acercar posiciones y encontrarle una salida al conflicto que se desató el domingo al mediodía, cuando el DT decidió excluir a Ortega del equipo y éste estalló de bronca. Si bien la relación entre las partes se presenta irreconciliable, el vice de River, Domingo Díaz, admitió que un pedido de disculpas de Ortega a Simeone podría distender la situación. “Pedir disculpas no le hace mal a nadie”, expresó el dirigente.

Aguilar tenía planeado de antemano juntarse mañana con Simeone para comenzar a delinear el equipo que afrontará en el próximo semestre el torneo Apertura y la Copa Sudamericana. Pero ahora deberá aprovechar la reunión para comenzar a definir la situación de Ortega, con quien el dirigente quiere contar a pesar de la resistencia del técnico.

Según trascendió, el de mañana sería el último intento de Aguilar por recomponer las cosas entre Ortega y Simeone; y de no poder lograrlo, aceptará la decisión del jugador de irse del club, a pesar del reciente ofrecimiento que le había hecho la dirigencia de extenderle su contrato hasta 2011.

Simeone excluyó a Ortega del partido del último domingo frente a Banfield porque el delantero se presentó en la práctica del día sábado en malas condiciones, y no volvió a hablar del tema a pesar del ataque verbal que sufrió por parte de Ortega. El que sí habló en su lugar fue el vice Díaz, quien respaldó al entrenador. “Las palabras de Ortega fueron dolorosas y la disciplina de Simeone no se negocia”, aseguró el dirigente.

“Tengo una pésima relación con el cuerpo técnico. Estoy cansado de que me forreen. Queda claro que no me voy de River porque yo quiera sino porque tengo que hacerlo”, argumentó Ortega el domingo. “Esta semana seguramente me juntaré con el presidente para encontrar la mejor forma de irme. Creo que va a ser lo mejor porque no tengo buena relación con Simeone. Quiero aclarar que con mis compañeros está todo bien”, agregó el jujeño.