Satisfecha por el rendimiento del segundo tiempo contra España, el martes, la Selección Argentina de básquetbol ya se prepara en Ourense para debutar mañana en el triangular que hoy abren el campeón del mundo y Lituania, el primer rival argentino en los Juegos Olímpicos. El cordobés Fabricio Oberto, que espera poder retornar al equipo en el partido de mañana ante los lituanos, aseguró que el nivel y la confianza necesarias para defender con éxito la medalla dorada “se lograrán a medida que pase el tiempo y también nos vayamos incorporando los que faltamos en el equipo”, dijo Oberto. “Lo importante es que nos metamos en la rutina de juego, para que el tema de las lesiones quede atrás y no sea un problema” para la competencia.

“Volvió Ginóbili, pero nos siguen faltando Leonardo (Gutiérrez) y Fabricio (Oberto), y con tipos grandes como los que tiene España se sufre mucho”, afirmó Carlos Delfino. El santafesino cree que le falta mucho trabajo al equipo porque, “sin lugar a dudas, para retener la medalla de oro hay que jugar al 100 por ciento todos los partidos”. Y añadió: “No va a ser nada fácil. Debemos tener mucha paciencia, saber que cada partido es una final y trabajar muy duro. Para el ahora jugador del Khimki ruso, “lo más positivo del arranque fueron las ganas y el juego aguerrido del segundo tiempo (contra España), cuando nos movimos con más inteligencia y defendimos bien. Casi nos alcanza para ganarle a España”.

El alero Andrés Nocioni aseguró que “hay que quedarse con el segundo tiempo, porque se jugó con personalidad y mejoró en defensa. Además, se nos abrió el arco, porque con los triples estuvimos ahí nomás de ganar”.

Para Nocioni, la Argentina no jugó “un gran partido técnicamente”, pero al final el balance es “bastante positivo”, porque “fue un partido parejo que se pudo haber ganado”, opinó.

“En el segundo tiempo más que nada mejoramos en la defensa y fue importantísimo. Pero no hay que preocuparse porque falta mucho para los Juegos Olímpicos y a esta altura estamos en muchísimas mejores condiciones que otras veces ante un torneo tan importante”, agregó.

Oberto subrayó que del equipo que consiguió el oro en Atenas “se mantiene el espíritu ganador, el sentimiento por jugar en la selección”. También destacó “la solidaridad, jugar para el otro, hacer mejor a tu compañero, eso está intacto, y creo que es lo que va a volver a colocarnos en el lugar que hemos estado en los últimos años: entre los cuatro primeros del mundo”, aseguró. “Todos tenemos los pies sobre la tierra, y esa humildad nos va a ayudar mucho a retener el oro”, según Oberto. Para Delfino hay “hambre de repetir la medalla, ilusión y convicción. Creemos que podemos hacerlo otra vez”, sentenció.