San Lorenzo pagó muy caro sus errores. Porque ganaba cómodo el partido con dos goles de Barrientos y, tras el descuento de Fabbiani, otro de Adrián de González, de penal. Pero Newell’s no bajó los brazos y, con el Ogro como abanderado, luchó hasta conseguir la igualdad, con tantos de Vangino y Ré. Ambos conjuntos terminaron con diez y el árbitro Lunati tuvo otra noche de flaco protagonismo.

Mucho se había hablado del duro choque que San Lorenzo debía afrontar en Rosario ante Newell’s, uno de los equipos que está cumpliendo un buen papel en Apertura. Pero casi no hubo tiempo para especulaciones, porque cuando todavía los equipos no terminaban de hacer pie en la cancha, San Lorenzo pegó el primer golpe y puso el partido 1-0, tras una buena habilitación de Bergessio para Barrientos, quien se coló entre los centrales para conectar medio mordido ante la salida de Peratta.

Pero no quedó ahí, porque los rosarinos quedaron medio noqueados y la visita volvió a aprovechar una oportunidad para ampliar la ventaja y dejar a los locales prácticamente en la lona. Otra vez Barrientos. En esta avanzó con pelota dominada entre los defensores de rosarinos, dejó a dos en el camino y conectó al arco con un zurdazo recto que Peratta apenas logró desviar pero sin poder evitar el segundo.

Newell’s no encontraba claridad como para descontar, un poco por fallas propias y otro porque San Lorenzo hacía un buen trabajo defensivo mientras esperaba liquidarlo de contra. Sin embargo, Vangioni, habilitado por Fabbiani, pudo acaso descontar con un lindo derechazo que se le fue por arriba. Después estuvo cerca Fabbiani, luego de matar la pelota con el pecho y sacar un violento derechazo de 30 metros que Orión tapó exigido.

El premio al esfuerzo de los rosarinos llegó en el segundo tiempo. El trámite cambió luego de un golazo de Fabbiani. El Ogro mató la pelota delante de la línea de los centrales, se les escapó a Aguirre y sacó otro violento derechazo, pero esta vez fue implacable y puso el marcador 2-1.

Poco después, San Lorenzo sufrió la expulsión de Juan Manuel Torres, por doble amarilla, y cuando parecía que se le podía complicar, apareció Adrián González mano a mano frente a Peratta, que lo derribó en el área para que Lunati cobrara el penal que el propio González cambió por el 3-1. Pero la cosa no terminó ahí. Newell’s, que no se resignaba, volvió a descontar con un tanto de Vangioni y, sobre el final, habilitado por Fa-bbiani, que estaba en posición adelantada, Ré anotó el empate que dejó a San Lorenzo con sensación de derrota.