A la Selección Argentina Sub-20 se le achicó el margen. Tanto, que está obligada a ganar los dos compromisos que le quedan para no depender de otros resultados para llegar al Mundial de Egipto. En principio, esta noche deberá vencer a Venezuela, en un encuentro que también es clave para las aspiraciones de los locales.

El conjunto que dirige Sergio Batista parece a esta altura no tener respuestas anímicas y futbolísticas para superar el mal momento, cuando faltan dos fechas para la finalización del certamen. Por eso, pinta complicado que pueda ganar dos partidos seguidos para obtener el pasaje para el Mundial. Hasta ahora, no lo consiguió: jugó siete partidos, de los cuales solamente ganó uno, cayó en dos e igualó los restantes cuatro. El único aspecto positivo es que tendrá enfrente a los dos rivales más accesibles del hexagonal final, Venezuela y Colombia. Claro que a ninguno de los dos pudo vencerlos en la fase inicial, cuando empató 1-1 con ambos.

Lo concreto es que la Argentina cuenta con un punto en tres partidos y necesita superar en la tabla a Colombia y Venezuela, los dos equipos que tiene por delante, ambos con tres unidades. Si les gana, tendrá su boleto para Egipto, sin importar lo que hagan los colombianos y los venezolanos en el restante encuentro. La otra posibilidad es obtener un triunfo y un empate, aunque en ese caso dependerá de que su adversario en ese partido pierda el otro compromiso. Si suma una nueva derrota, ya no habrá posibilidades.

“El equipo está haciendo las cosas bien. En este momento hay que trabajar en lo anímico”, aseguró Batista, que sabe que su equipo baja el nivel ante cualquier adversidad. En los últimos dos partidos, el rendimiento futbolístico no fue tan malo, pero en cuanto Brasil y Uruguay se pusieron en ventaja, ya no hubo margen para revertir el panorama.

Para el trascendental partido de esta noche, Batista no podrá contar con el expulsado Cristian Gaitán ni con Franco Zuculini que recibió dos fechas de suspensión por haber visto la tarjeta roja ante Brasil. Su lugar lo podría ocupar Leandro Velázquez, que cumplió buenas actuaciones en la primera fase. Además, por la necesidad de obtener un triunfo, es probable que el entrenador retrase a Eduardo Salvio a la línea de volantes e incluya otro delantero para conseguir mayor peso ofensivo. Igual, por el escaso tiempo de trabajo y de recuperación entre partido y partido, el técnico recién decidirá los nombres y la estrategia un rato antes del comienzo.