Astrada se la jugará en el fondo con Cabral, que no jugó ni un minuto en el torneo.

A pocas horas para el duelo máximo ante Boca, el entrenador de River, Leonardo Astrada, sorprendió ayer con una modificación en el plantel que iniciará el duelo en la Bombonera. El conductor dispuso una práctica de fútbol en la que paró el equipo titular e incluyó al defensor Gustavo Cabral en reemplazo de Nicolás Sánchez. Astrada dijo en conferencia de prensa, tras la práctica a puertas cerradas en Ezeiza, que Vega; Ferrari, Ferrero, Cabral, Juan Manuel Díaz; Almeyda, Ahumada, Rodrigo Rojas; Gallardo; Funes Mori y Gustavo Canales “probablemente” sean los elegidos y que definirá todo en la práctica de hoy.

El técnico trabajó toda la semana con la misma defensa, pero ayer ubicó a Cabral, que jugó partidos en reserva después de superar una inflamación en su rodilla izquierda, que le costó no jugar ni un minuto en el campeonato. “Es un jugador importante”, deslizó Astrada sobre Cabral en la atención a los periodistas. También se producirá el retorno de Almeyda, después de dejar atrás una contusión muscular en el gemelo izquierdo, aunque se moverá en posición de volante por derecha y no en la función de “doble cinco” con Ahumada.

En tanto, el paraguayo Rojas jugará por primera vez en el sector izquierdo de la mitad de la cancha, después de hacerlo en algunos encuentros por derecha y otros como enlace. En definitiva, los cambios con respecto al equipo que viene de vencer a Huracán serán dos: Cabral por Sánchez y Almeyda por Roberto Pereyra. Ariel Ortega, quien el jueves participó de la práctica de fútbol para los suplentes, otra vez quedó al margen del grupo una vez que comenzaron los trabajos con pelota. La lista de concentrados la completan Marcelo Ojeda, Cristian Villagra, Nicolás Sánchez, Roberto Pereyra, Facundo Affranchino, Mauro Díaz, Daniel Villalva y Mauro Rosales. En relación al partido, Astrada advirtió que su equipo no debe dejar recibir la pelota a Juan Román Riquelme “porque con espacios te puede ganar el partido”. “No hay que darle el protagonismo a Boca porque tiene jugadores de mitad de cancha hacia adelante que pueden desequilibrar. Si nosotros le permitimos a Riquelme recibir con espacios es un jugador que te gana el partido”, aseguró Astrada. De todas maneras, el técnico no ponderó al enlace de Boca como el único recurso de su rival para tratar de imponerse en la décima fecha del torneo Clausura. “También debemos cuidarnos de (Nicolás) Gaitán, no hay que darle la posibilidad de arrancar porque tiene buen arranque y terminación de jugada”, remarcó.

En el mismo contexto fue ineludible la referencia al goleador Martín Palermo y a la fórmula para que no lleve complicaciones a la defensa de River. “Sabemos que Palermo es importante y no puede estar cómodo en el área. Cuanto más lejos esté de esa zona menos va a lastimar. Hay que obligarlo a salir para que reciba afuera y complicarle el volver a entrar”, explicó.

Después de hablar de las virtudes del rival, vaticinó dónde estará la llave para ganar un superclásico de visitante después de seis años. “La idea es tener un medio equilibrado y la posesión de pelota para poder disputar el partido en la mitad de la cancha, que es donde se va a terminar definiendo el partido”, sostuvo.

A Ibarra lo probaron a fondo. Como respondió bien, volverá al equipo en el clásico.

El plantel de Boca cumplió ayer una nueva sesión de entrenamientos con vistas al superclásico del domingo y no se registraron sorpresas, por lo que el equipo puede darse por confirmado, aunque el director técnico Abel Alves volvió a evitar el contacto con los medios.

De no surgir ningún imprevisto, los que saldrán a la cancha en la Bombonera son: Javier García; Hugo Ibarra, Ezequiel Muñoz, Luiz Alberto, Claudio Morel Rodríguez; Gary Medel, Jesús Méndez, Matías Giménez; Juan Román Riquelme; Nicolás Gaitán y Martín Palermo.

Los otros ocho futbolistas que quedaron concentrados desde las 21 de ayer en el Hotel Madero (de los cuales uno quedará fuera del banco) son Josué Ayala, Julio Barroso, Breyner Bonilla, Cristian Erbes, Cristian Chávez, Federico Insúa, Pablo Mouche y Lucas Viatri.

La lista ofrece algunos detalles llamativos, principalmente por las ausencias, ya que por ejemplo Fabián Monzón, el candidato a participar del próximo Mundial y que fuera titular en las últimas tres fechas, pasó directamente a no estar ni siquiera entre los candidatos a suplentes. Otro tanto puede decirse de Ariel Rosada, titular frente a Racing y Tigre como volante central. En tanto, entre los profesionales con más trayectoria que siguen sin ser tenidos en cuenta se encuentran Gabriel Paletta, Juan Krupoviesa, Sebastián Prediger (la última incorporación) y Guillermo Marino (no tuvo ni un minuto de competencia en lo que va del Clausura).

También sobresale el hecho de que Morel Rodríguez sea el único de la nómina con oficio y habitualidad en la posición de lateral izquierdo, de modo que si por alguna circunstancia el paraguayo debiera ser reemplazado, Alves se verá en la necesidad de improvisar.

Boca tendrá como titular a Giménez, que hará su debut absoluto en partidos oficiales, y en el banco puede llegar a estar el colombiano Bonilla, que tampoco tomó parte en ningún encuentro de Primera. Así que, en caso de jugar, éstos se sumarán a algunos jugadores notorios del equipo que también hicieron su debut oficial en un superclásico: Antonio Rattin (1956), Norberto Madurga (1966), Rubén Sánchez (1966), Vicente Pernía (1973), Jorge Benítez (1973), Carlos María García Cambón (1974, record vigente de cuatro goles en un superclásico), Jorge Ribolzi (1976), Carlos Navarro Montoya (1988) y Juan Simón (1988).

El entrenamiento de ayer en Casa Amarilla consistió de una primera parte física, después se realizó una práctica de fútbol informal con tres equipos utilizando media cancha y finalmente se practicaron remates desde afuera del área y definición ante el arquero.

Tal como la semana anterior, el entrenador eligió no hablar con el periodismo, suspendiendo la habitual conferencia de prensa de los viernes, previa a los partidos. Ante esta situación, los futbolistas hicieron lo propio. El arquero Javier García, requerido cuando iba a subirse a su automóvil, dejó en claro que era una decisión conjunta la de no hacer declaraciones antes del superclásico.